El verano es tiempo de helados, y para disfrutar de ellos, nada como elaborarlos a partir de nuestros postres favoritos. De esta forma, podremos segur disfrutando de nuestras propuestas dulces en su versión más refrescante. ¿Te animarías a preparar un helado de arroz con leche ? Si eres un amante de este postre tan tradicional, ¡estás de suerte! ¿Cómo se hace el helado de arroz con leche? Lo primero que debes hacer es un arroz con leche casero . Tanto si te gusta su fórmula más clásica como si lo prefieres sin lactosa, con leche de soja o con frutos secos, por ejemplo, cualquiera de las propuestas que te damos son válidas para seguir con esta receta helado de arroz con leche . Lo mejor de esta elaboración es que podrás disfrutarla con dos finales: en helado de bola o en formato polos , más fáciles para los pequeños de la casa. Además, se trata de toda una receta de aprovechamiento , ya que puedes utilizar el arroz con leche que te haya sobrado de alguna ocasión especial para conservarlo en forma de helado y consumirlo cuando más apetezca en casa. Como consejo, utiliza una batidora eléctrica, con la que conseguirás un arroz con leche más cremoso y homogéneo , perfecto para convertirlo después en un irresistible helado. ¡Ah! ¡Y coge la canela! También la vas a necesitar. Helado de arroz con leche Para 4 personas Ingredientes 500 gramos de arroz con leche 500 mililitros de nata líquida (crema de leche) 250 gramos de leche condensada 2 cucharadas soperas de azúcar glas Canela en polvo para decorar Paso a paso Prepara el arroz con leche y tritúralo Elabora el arroz con leche como en la receta que hemos dejado en la introducción y, una vez esté frío, tritúralo en una batidora hasta que quede una crema homogénea. Monta la nata Monta la nata poniéndola en el bol de la batidora junto al azúcar glas. Prepara la mezcla Una vez montada la nata, apaga la batidora y añade el arroz con leche y la leche condensada. Mezcla manualmente hasta que todo esté perfectamente integrado. Congela el helado Vuelva la mezcla final en un recipiente tipo tupper, tápalo y mételo en el congelador durante al menos 12 horas. Para hacerlo en formato polos, rellena los moldes y asegúrate de poner bien el palito en cada uno de ellos. Sirve con canela y... ¡a disfrutar! Una vez tengas el helado bien congelado, puedes servirlo acompañado de canela al gusto.