Tarta de profiteroles francesa (croquembouche), un postre navideño ¡espectacular!

Es un postre espectacular, típico de la cocina francesa más original: una tarta perfecta para poner el cierre dulce a una comida o una cena de celebración

TARTA DE PROFITEROLES RELLENOS
Mónica Corredera
Mónica Corredera

Colaboradora

La croquembouche es una preparación de lo más original que procede de la gastronomía francesa. Se trata de una tarta de lo más especial, que se elabora construyendo una pirámide de profiteroles rellenos de crema pastelera, nata o chantilly y uniéndolos con hilos de caramelo.

El bocado es suave, por el relleno de los buñuelos, pero también crujiente gracias al caramelo. Una tarta muy especial con la que pondrás el broche de oro a cualquier comida festiva.

Fácil, pero laboriosa

Tenemos buenas noticias: aunque pueda parecer lo contrario, dada la espectacularidad de su forma, la croquembouche es muy fácil de preparar. No conlleva demasiada dificultad, aunque sí que resulta laboriosa.

Como la receta es larga, puedes ir siguiendo las explicaciones en el siguiente vídeo, obra de La Cocina de Loli Domínguez.

Croquembouche
Para 6 personas
Ingredientes

Para la masa de los profiteroles

  • 4 huevos grandes
  • 150 ml de agua
  • 100 ml de leche
  • 100 gr de mantequilla sin sal
  • 150 gr de harina de trigo
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de azúcar

Para la crema pastelera

  • 500 ml de leche
  • 3 yemas de huevo
  • 1 huevo entero
  • 100 gr de azúcar
  • 3 hojas de gelatina
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 45 gr de Maizena
  • 300 ml de nata líquida para montar
  • 3 cucharadas de azúcar glas

Para el caramelo

  • 200 gr de azúcar
  • 150 ml de agua
  • 1 cucharada de glucosa líquida o de zumo de limón
Paso a paso
  1. Preparar la masa de los profiteroles

    Pon a fuego medio en una cazuela el agua, la leche, el azúcar, la sal y la mantequilla, y calentar hasta que esta última se funda. Añade la harina y remueve hasta lograr una masa que se despegue de las paredes. Retira del fuego para dejar que se enfríe ligeramente.

  2. Incorporar los huevos

    En un cuenco aparte bate dos huevos y ve añadiéndolos a la masa, integrándolos por completo. Incorpora el tercer huevo batido y remueve hasta ver la consistencia de la masa. Esta ha de quedar con una textura flexible, ni demasiado líquida ni muy espesa. Bate el cuarto huevo, añade la mitad e integra hasta lograr la textura deseada. 

  3. Formar los profiteroles

    Pon la masa en una manga pastelera con una boquilla grande y lisa, de aproximadamente 1,5 cm de diámetro. Ve formando buñuelos sobre una bandeja con papel de horno, dejando espacio entre ellos. Aplana el pico que queda con el dedo mojado en agua, para que la forma sea redondeada. Hornea en horno precalentado a 200ºC, con calor arriba y abajo. Tendrás que tenerlos 10 minutos y después, sin abrir la puerta del horno, bajar la temperatura a 180ºC durante 15 o 20 minutos más, hasta que estén doraditos. Sácalos del horno y deja que se enfríen.

  4. Preparar la crema pastelera

    Pon las yemas en una cazuela, más el huevo entero, la leche y el azúcar, y mezcla con unas varillas. Incorpora la Maizena y remueve hasta que no queden grumos. Añade el extracto de vainilla.

  5. Calentar la mezcla

    Lleva la cazuela al fuego (medio) y cocina sin dejar de remover hasta que la crema espese. Sacar del fuego e incorporar las hojas de gelatina, previamente hidratadas. Remueve hasta que se mezclen por completo. Esto es para que la consistencia de la crema sea firme, ya que después tendrás que añadir la nata. Pon la crema en un recipiente y tapa con film, de forma que este quede en contacto con la crema, para evitar que se forme costra.

  6. Montar la nata

    Saca la nata de la nevera (debe estar muy fría) y ponla en un bol. Bate con batidora o varillas eléctricas para montarla y añade dos cucharadas de azúcar glas. Tienes que batir la nata hasta que quede montada, pero no del todo.

  7. Mezclar con la crema

    Remueve la crema pastelera que tenías reservada y ve añadiendo la nata montada, integrándola poco a poco. Pon la crema resultante en una manga pastelera con boquilla fina y ve rellenando los profiteroles uno por uno, de forma que queden llenos. 

  8. Hacer el caramelo

    En una olla a fuego medio pon el azúcar y el agua, más la glucosa líquida o, en su defecto, el zumo de limón. Deja que hierva hasta obtener un color amarillo suave, y para la cocción sumergiendo el fondo de la olla en un recipiente más grande con agua fría.

  9. Montar la tarta croquembouche

    Para ello necesitarás un soporte que puedes hacer con una cartulina. Haz un cono del tamaño que desees y fórralo con papel de horno. Sobre el mismo tendrás que ir pegando los buñuelos con el caramelo. Moja la base del profiterol en caramelo y pégala en la base del cono. Ve añadiendo profiteroles haciendo filas de abajo hasta arriba.

  10. Decorar la tarta

    Con el caramelo sobrante haz hilos de caramelo sobre toda la tarta para decorarla. Espera a que el caramelo se enfríe y los buñuelos queden bien pegados. Ya está terminada la croquembouche.

 

Es una tarta cuya elaboración lleva su tiempo. Sin embargo, merece la pena, ya que gusta muchísimo a grandes y pequeños. ¡Causará sensación!