La biografía de Elton John todavía no ha salido a la venta y ya ha sorprendido a muchos. Entre los aspectos que han causado más revuelo hasta el momento, se encuentran algunos relacionados con la familia real británica. El cantante fue muy amigo de Diana de Gales. La estrecha amistad que les unía hizo que Elton fuera testigo de momentos protagonizados por diferentes miembros de la familia de Isabel II. Unos episodios privados que él ahora ha decidido desvelar.
En uno de los capítulos de su autobiografía dedica un espacio a Lady Di. Tan importante fue en su vida la madre de Guillermo y Harry de Inglaterra que ha querido tener un recuerdo muy especial para ella. Pero además de contar la parte buena y bonita de su amistad, Elton John también hace alusión en su libro a uno de los enfados que tuvieron. Cuenta que este rifirrafe tuvo lugar pocos meses antes de que Lady Di falleciera. Diana de Gales había escrito el prólogo de un libro de Gianni Versace cuyas ventas estaban destinadas a recaudar fondos. Días antes de que el libro saliera publicado, Lady Di se echó para atrás y retiró sus palabras, probablemente influida por la familia real británica. Algo que a Elton John no le hizo ninguna gracia y por lo que se enfadó.
![Elton John Isabel II](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 611"%3E%3C/svg%3E)
En el libro también hay hueco para anécdotas relacionadas con Isabel II. El artista no se ha cortado a la hora de desvelar que fue testigo de las bofetadas que la reina de Inglaterra le propinó a su sobrino Linley. La soberana le pidió un favor y al ver que el joven le desobedecía no dudó en pronunciar una frase de lo más contundente acompañada de algunas bofetadas: “No discutas conmigo, soy la reina”.
Felipe de Edimburgo también protagoniza algunos de los secretos que desvela Elton John en sus memorias. El cantante ha relatado cómo el marido de Isabel II tuvo unas palabras desafortunadas hacia él. “¿Has visto a ese imbécil que conduce ese horrible coche?”, le pregunto el duque de Edimburgo al artista. Algo a lo que respondió que sí, que era él el dueño de ese coche al que se refería.