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Mañana de viernes. P. se me acerca cauteloso y comienza a decirme: “Jorge, no te lo quería contar para no amargarte, pero el lunes llueve”. Supongo que a la gente que me sigue desde hace tiempo no le sorprenderá que llueva allá donde voy a descansar, porque siempre me pasa. Yo creía que en pleno verano y en el Mediterráneo me iba a salvar de la maldición. Pues no. Pero en estos momentos prefiero que no nos regodeemos en nuestra mala suerte.
El domingo llevaré dos semanas sin parar ni un solo día, y que caigan chuzos de punta o meteoritos envenenados me la trae al fresco. Así que me abstraigo, y me pongo a contar las horas que faltan para que el domingo me suba a un avión. Al ratito, ducha rápida y a grabar otra audición de ‘Got Talent’. Nos lo estamos pasando francamente bien. Me río muchísimo con Eva Hache, es una auténtica cajita de sorpresas. Controla muchísimo de magia, y me he enterado de que en su día hizo un curso para andar con zancos. Está muy alejada de la gente que conforma mi universo profesional, y muy a menudo se ve obligada a preguntarme quién es quién.
Hoy me descojonaba cuando me explicaba que, antes de entrar al teatro, le ha cogido una señora por banda y le ha dicho: “Dale muchos recuerdos a Mila”. “¿Qué Mila?”, ha respondido ella. “A Mila Ximénez”. “Es que no la conozco”, se ha excusado Eva. “Pues muy bien. Pero no te olvides de decirle que me gusta muchísimo”. Eva todavía sigue flipada. “A lo mejor la gente piensa que los que trabajamos en televisión vivimos todos en el mismo edificio”.
Ayer tuvo que ir a Telecinco y me envió una fotografía con dos personas que la abordaron por los pasillos: “¿Quiénes son estas señoras?”. “Las Mellis”, le respondí. “Examigas de la Pantoja”. Y cuando me di cuenta de que estuve a punto de incluir una breve biografía de las muchachas, llegué a la conclusión de que necesitaba empezar a desconectar. Aunque truene.