Kelly Fisher, o la modelo que demandó a Dodi Al-Fayed por romper su compromiso cuando conoció a Diana de Gales

La estadounidense se enteró por la prensa de la infidelidad del multimillonario heredero egipcio, quien siempre tuvo fama de playboy

Álex Ander
Álex Ander

Periodista especializado en corazón y crónica social

Kelly Fisher, interpretada por Erin Richards
The Crown

La sexta y última temporada de la serie ‘The Crown’, estrenada hace unos días en Netflix, ha vuelto a traer a la actualidad a Kelly Fisher (56 años), la despampanante modelo estadounidense que siempre aseguró que Dodi Al-Fayed le había pedido la mano poco antes de conocer a Lady Di, y que incluso llegó a presentar una querella contra el multimillonario heredero egipcio por faltar a su compromiso de matrimonio.

Dodi Al-Fayed tuvo siempre fama de playboy y llegó a hacer sus pinitos como productor cinematográfico, lo que podría explicar su predilección por las modelos y actrices. En 1986 se casó con la modelo estadounidense Suzanne Gregard, de la que se separó al año siguiente, no sin antes pagarle varios miles de millones de pesetas para que le devolviera unas alhajas recuerdo de familia que Dodi le había regalado.

En aquella misma época, el hijo del propietario de los almacenes Harrods de Londres conoció a Diana de Gales en Windsor, durante un partido de polo que el equipo de Dodi ganó al de Carlos de Inglaterra, pero su relación amorosa no comenzaría hasta noviembre de 1996. Apenas unos meses antes se había hecho oficial el divorcio entre Diana y el entonces príncipe heredero del trono británico, quien con el tiempo confesó que jamás había estado enamorado de ella y que había cometido adulterio. 

'The Crown' sugiere que Dodi le propuso matrimonio a Diana presionado por su padre, Mohammed Al-Fayed, quien podría haber orquestado toda su relación. Lo que está fuera de toda duda es que Diana y su nueva ilusión nunca escondieron su romance.

En verano de 1997, Mohammed invitó a la princesa del pueblo y a los hijos de esta a pasar unos días en su yate Jonikal, en la Costa azul francesa. Poco después, el Sunday Mirror publicó unas fotografías donde Diana y Dodi aparecían besándose a bordo de la embarcación. Al parecer, aquellos días el egipcio había dejado en París a su novia de entonces, Kelly Fisher, quien se enteró por la prensa de la infidelidad del hombre con el que salía.

Triste y humillada

A su regreso a Malibú, la despechada muchacha convocó una rueda de prensa donde acusó a Dodi de "faltar a su compromiso de matrimonio". Acompañada de su madre y su abogada, la modelo rompió en lágrimas delante de los periodistas y les contó que el nuevo amor de Lady Di le ofreció casarse y hasta le regaló un anillo de pedida decorado con zafiros y brillantes.

Según se recuerda en el libro 'Flash', la historia la desmintió un portavoz de Dodi, "pero Kelly afirmó sentirse 'triste y humillada', lo cual no le impidió vender sus tristezas al diario 'News of the World' por 50 millones de pesetas y reconocer que 'Dodi tenía a Diana como novia formal y a mí en la clandestinidad como relación sexual discreta'".

Además, en ese mismo libro se explica que, a los pocos días de la muerte de Dodi, quien falleció junto a Diana el 31 de agosto de 1997, después de que el Mercedes S280 en el que ambos viajaban se estrellase contra el pilar número 13 del túnel del Puente del Alma, Kelly estuvo en Madrid "y desfiló en la Pasarela Cibeles... sin el anillo que le regalara su presunto y fallecido novio. No mostró ningún síntoma de desánimo, de tristeza o de humillación".

Acabó pasando página

La polémica marcó el pico de popularidad de Fisher, quien nació en Louisville, Kentucky, pero emigró con su familia a Toronto debido a las obligaciones profesionales de su padre. Allí fue donde empezó su carrera como modelo cuando tenía dieciséis años, antes de aparecer en la portada de la revista Marie Claire y desfilar para diseñadores importantes como Armani.

La estadounidense tenía 30 años y estaba de vacaciones en París cuando se cruzó con Dodi, que ya era cuarentón. Según sostienen algunos, el flechazo fue inmediato. Tras el fatal accidente de coche del egipcio, Fisher retiró su demanda y, aunque es cierto que no acudió a su entierro, pidió a sus abogados que hicieran público un comunicado en el que mostraba su pesar por lo ocurrido: "Kelly quería mucho a Dodi y está destrozada por su pérdida y la de la princesa Diana. Nada es más importante que la vida de un ser humano. En vista de esta enorme tragedia, Kelly perdona a Dodi por todas las injustificas que cometió contra ella".

En 2007, Fisher volvió a los titulares al declarar como testigo en el juicio por la muerte de Dodi y Diana. "Es bastante humillante sentarse aquí y tratar de demostrar a la gente que alguien quería casarse contigo", señaló entonces. Aquel mismo año conoció durante un safari en África a Mikhail Movshina, un piloto con el que tuvo una hija en 2011. Después de pasar una temporada residiendo en París y en los Alpes franceses, la pareja se casó y se instaló en Carolina del Sur, donde cuentan que ella lleva hoy una vida tranquila y trabaja como promotora inmobiliaria.

 

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