"Rosa llevaba ya tanto tiempo ausente que parecía que hacía años que se había largado del programa"

Hablo con César el domingo por la mañana, que es uno de los amigos que más me afea que sea poco cariñoso. Al menos, de cara a la galería. De ahí que me sorprenda que me diga que fui el único que estuvo más o menos bien despidiéndose de Rosa Benito. “Los demás estuvieron muy siesos”, concluye. Tampoco se le podía pedir más a los colaboradores. Las ideas y venidas de Rosa se han convertido ya en un clásico de Sálvame, de ahí que a mis compañeros les costara mostrar cualquier tipo de emoción. De hecho, Rosa llevaba ya tanto tiempo ausente que parecía que hacía años que se había largado del programa. Se fue por la puerta de atrás. No se lo merecía ni ella ni el programa. Recuerden que no hace tanto tiempo rivalizaba en popularidad con la mismísima Belén Esteban.