Centrada en su gira de teatro, preparando sus próximos proyectos, viajando por sus lugares favoritas, disfrutando de su hija, del amor… Así está pasando Paz Padilla (53 años) su verano. Una época que, una vez más, vuelve a estar marcada por el aniversario más triste y que marca su día a día: se cumplen tres años del fallecimiento de su marido.
El tercer aniversario del fallecimiento del marido de Paz Padilla
Esta misma semana, el 19 de julio, se cumplen tres años del fallecimiento de Antonio Juan Vidal. El marido de Paz Padilla falleció tras meses de lucha contra el cáncer. Padecía un tumor cerebral que Paz y su familia prefirieron llevar en la más estricta intimidad, de ahí que la noticia de su pérdida pillara a muchos por sorpresa. En aquel momento, Paz Padilla se quedó rota y recibió el apoyo de su familia y amigos. Pero desde ese momento, dejó claro que la muerte del hombre de su vida iba a marcar un antes y un después en ella de la mejor forma posible.
Paz Padilla sufrió y sigue sufriendo el fallecimiento de su marido, le echa mucho de menos, le tiene muy presente, sigue hablando mucho de él… Pero ha sabido llevar su muerte de una forma que a ella le ha ayudado mucho a afrontarla. Desde aquel momento, la presentadora ha concedido entrevistas en las que ha comentado cómo vive el duelo en paz y poniendo por delante el ser feliz. Ha escrito un libro sobre esta cuestión que después ha llevado al teatro en forma de obra, con la que todavía hoy sigue de gira. Y se ha quedado con los mejores recuerdos y aprendizajes de su matrimonio.
Paz Padilla, recupera la ilusión
Del lado contrario, está la felicidad de Paz Padilla en el amor. Dos años más tarde del fallecimiento de su marido, en julio de 2022, vio la luz la nueva relación de la presentadora. La presentadora siempre ha defendido que el hecho de quedarse viuda, no es incompatible con volver a enamorarse. Todo lo contrario. Según ella, el echar de menos a su marido y todo el dolor pasado, no es impedimento para compartir su amor con otro hombre.
Paz Padilla, en una entrevista en ‘El Hormiguero’, hizo una reflexión al respecto con la que dejó claros sus sentimientos. La presentadora comentó que “muchos dicen que si tanto lo quería, cómo me han visto con otro chaval. Quiero hacer una reflexión, ¿cuánto tiempo hay que esperar para rehacer tu vida? ¿Estamos en la época de Egipto que cuando muere el faraón se entierra a la mujer con él? El amor no se dosifica, es inmenso y yo tengo una gran capacidad amar. No dejas de amar a tu madre porque ya no está o a un hijo porque tienes otro”.
Esta fue una de las pocas veces en las que Paz Padilla se ha pronunciado sobre su novio. La presentadora prefiere llevar su noviazgo con la más absoluta discreción. No se esconden en el sentido de que se dejan ver juntos durante diferentes planes. En escapadas, planes gastronómicos, en lugares importantes para ella como Cádiz… Pero en sus redes sociales, no hay ni rastro del fotógrafo. La clara muestra de que su intención es vivir su relación en la intimidad.
Paz Padilla, centrada en su familia y en su trabajo
Este verano marcado por estos dos aniversarios, Paz Padilla lo está disfrutando de la forma más relajada posible, centrada en su familia y su trabajo. Está pasando el mayor tiempo posible en la playa. En concreto Cádiz y Zahara de los Atunes, son dos de sus destinos favoritos para esta época del año. Con su novio, con sus hermanos, con su hija Anna Ferrer… Está muy bien rodeada en estas semanas de desconexión. Desde allí se está mostrando encantada pese a un contratiempo que ella misma ha contado.
El contratiempo de Paz Padilla con el chiringuito familiar
Paz Padilla, en sus redes sociales, ha denunciado lo que ha sucedido con el chiringuito de su hermano en Barbate. Su hermano ya no va a regentar el Trompeta Beach porque el ayuntamiento de la localidad le habría dado la licencia a otro pujador. Algo que a ella le ha parecido fatal y no ha dudado en contarlo muy enfadada en sus redes sociales. “Se lo ha llevado uno, que no sabemos de dónde es, que ha apostado por el kiosco/bar de mi hermano la sorprendente cifra de 93 mil euros”, ha comentado sobre un lugar en el que han pasado muy buenos momentos familiares y del que ahora se tendrán que despedir.