La familia Campos está pasando por un momento muy complicado. El ictus que sufrió María Teresa el pasado martes ha puesto en jaque la tranquilidad que, tras varios meses de polémica constante, habían conseguido.
Aunque el ictus fue cogido muy a tiempo gracias a la velocidad con la que los trabajadores de la casa de Teresa actuaron, avisando a familiares y médicos, lo cierto es que los días pasan muy lentos y la evolución de la presentadora no se desarrolla al ritmo esperado.
Desde el momento de su ingreso tanto Terelu Campos como Carmen Borrego están pasando día y noche en el hospital acompañadas de su entorno familiar más cercano y de amigos íntimos como Rocío y Fidel Albiac. Las hijas de María Teresa además no han dejado de contestar a las numerosas muestras de cariño y preocupación que a través del teléfono les están llegando, a pesar de que ello les reste horas de sueño como la propia Terelu ha contado.
María Teresa Campos es una de las presentadoras más veteranas y queridas de la televisión en nuestro país y su estado de salud se ha convertido en noticia nacional. La puerta de la clínica en la que permanece ingresada se ha convertido en punto de encuentro de periodistas de todos los medios que quieren narrar en directo la evolución de la `Reina de las Mañanas´. La profesionalidad de Terelu y el cariño y agradecimiento que siente por sus compañeros es el motivo por el que la colaboradora ha atendido en todo momento a los medios de comunicación pero lo cierto es que ayer, a media tarde y tras una jornada muy intensa, la hija mayor de la presentadora del desaparecido `Qué tiempo tan feliz´ se mostró cansada y se le escuchó quejarse diciendo “no estoy para esto”.
A pesar de todo, las hijas de Teresa no han dejado de atender a sus compañeros y son ellas quienes están encargándose de transmitir las noticias acerca de la evolución de su madre.