Victoria Federica, angustiada por la cogida de su ex, Gonzalo Caballero

Vaya susto se llevó el tendido de Las Ventas y, en especial, Victoria Federica, cuando el torero Gonzalo Caballero fue cogido por el toro. Por suerte, la cosa quedó en eso, en un susto, pues Gonzalo Caballero solo sufrió un ligero traumatismo en la rodilla, de modo que el torero pudo acabar la tarde sin mayores problemas.

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Victoria Federica, pillada junto a un apuesto joven tras su ruptura con Jorge Bárcenas

Victoria Federica acudió a los toros acompañada de unas amigas y de su buen amigo Santiago Moyano, que se sentó a su lado. Después, Moyano se fue y Victoria Federica se quedó junto a otro joven que no era Miguel Jiménez Pimentel, con quien se dice que la hija de la infanta Elena habría recobrado la ilusión tras su ruptura con Jorge Bárcenas.

La hija de la infanta Elena y de Jaime de Marichalar presenció, angustiada, el revolcón que el toro le dio a Gonzalo Caballero, por quien siente todavía mucho cariño y admiración. Gran aficionada a los toros, pasión que ha heredado de su madre y de su abuelo, el rey emérito Juan Carlos, Gonzalo Caballero fue el primer gran amor de Victoria Federica. Gonzalo era amigo de Froilán y Victoria Federica aprovechó esa amistad para acercarse al joven torero. Pese a que ha habido informaciones respecto a que Victoria Federica y Gonzalo Caballero no llegaron a ser más que amigos –amistad que todavía perdura–, lo cierto es que hay miradas que no engañan y entre los dos jóvenes se adivinaba que algo había entre ellos, cuando menos por parte de una adolescente Victoria Federica.

Victoria Federica y Gonzalo Caballero, cuando eran pareja, en el Masters de tenis de Madrid.

La ruptura de Victoria Federica y Jorge Bárcenas no ha hecho que la joven se quede en casa, todo lo contrario. Vic tiene una intensa vida social y un enorme grupo de amigas y amigos que no la dejan sola en ningún momento. La hemos visto en la Feria de Abril de Sevilla, estos días en la Feria de San Isidro, y también en la boda de sus amigos Mami Montero y Javier Rodríguez-Tabernero, en la que lució un espectacular kimono de la firma de su amiga María García de Jaime.