Carmen Borrego atraviesa por uno de sus momentos más duros. Acuciada por los problemas económicos que le quitan el sueño, desvela que no puede sanear sus cuentas trabajando tan solo un día a la semana en ‘Viva la Vida’. Consumida por la ansiedad, necesita desesperadamente un aliciente laboral que le devuelva el reconocimiento profesional, siente que sus compañeros desprecian los más de 30 años de proyectos que jalonan su trayectoria como directora de programas. Dolida por las críticas que recibe por defender a Rocío Carrasco, desvela en exclusiva que cree que su amiga no va a perdonar a su hija Rocío Flores.
Texto: Karmele Izaguirre