Si te he visto… no me quiero acordar. Aitana Ocaña está tan contenta con su nueva vida triunfando en la música y enamoradísima de Miguel Bernardeau que no quiere acordarse de su pasado más reciente. Y esto incluye a Luis Cepeda, su ex. Para ello, ha optado por lo más radical: borrarlo por completo.
Ahora no encontramos alusiones a él, no fotos juntos. Aitana se ha encargado de eliminarle a fondo de su pasado, al menos de las redes sociales, que es lo que está de su mano.
Con eliminar sus fotos y menciones a él no ha tenido suficiente, también ha querido dejar de seguirle. Pese a que en Instagram se puede silenciar a aquellos ‘amigos incómodos’, y así no pasar por el incómodo trago del ‘unfollow’, ella sí ha querido pulsar el botón y poner final a su historia con él acabando con cualquier vínculo que les relacione. Los dos artistas, que se conocieron en OT cuando ambos tenían pareja, se enamoraron perdidamente y fueron una de las parejas más queridas que dio el concurso. Les vimos besarse en los conciertos, compartir mensajes de cariño y apoyo en las redes y a él hasta hacerle una fiesta sorpresa por su cumpleaños. A los pocos meses, y con la misma intensidad que entró su amor, se esfumó. La pareja cortaba y se negaban a hacer comentarios al respecto.
Mucho ha costado que Aitana admita que está ilusionada de nuevo. Han sido meses de rumores y hasta de que la madre de su chico, Ana Duato, lo confirmara. Ahora, Miguel y ella muestran su relación y parecen encantados.