Tajante y muy directo. El juez al frente del caso de Daniel Sancho habría dado, en las primeras horas del proceso, unas indicaciones muy claras a todas las personas acreditadas en la Corte provincial de Samui. Dos eran las consignas que debían seguir: les ha recordado el lugar en el que se encuentran y cuáles son las normas que tienen que cumplir al participar en el proceso. No puede salir ninguna información del procedimiento y así está siendo. En estos días, hemos podido comprobar lo difícil que está siendo informar desde Tailandia de todo lo que ocurre en el interior de la sala. Impera el silencio. Pero hay fuentes que sí han trasladado alguna de las conversaciones que se han escuchado en el interior de la misma. Una pregunta en concreto nos ha llamado la atención. Una interrogación directa del imputado y la respuesta con la que el juez le interrumpe. Parece que las dudas empiezan a quedar resueltas mucho antes de lo que deberían.
Las primeras horas del juicio de Daniel Sancho
En la primera jornada del juicio ya pudieron escucharse los primeros testimonios tras los alegatos iniciales de las partes y fue una sesión para leer también los cargos a Daniel Sancho, tal y como contaba en resumen Juango Ospina, abogado de la familia de Edwin Arrieta. Fue precisamente Ospina quien también el que explicaba las férreas normas que les impedían dar muchos más detalles sobre lo que está aconteciendo. Entre esas primeras declaraciones estaba la de la persona que le alquiló la moto en la que pudimos ver al acusado recorrer las calles de la isla de Ko Pha Ngan y en la que también grabaron las cámaras circular junto a la víctima horas antes del presunto crimen.
En la segunda vista, fueron cuatro las personas que habrían prestado declaración y que también son testigos del recorrido que hizo el chef en las horas previas y posteriores al supuesto delito que se está juzgando. Era el turno para la cajera del supermercado donde se le filmó comprando bolsas de basura y productos de limpieza, la vendedora de los cuchillos, una camarera que le habría atendido después de la muerte de Edwin Arrieta y la que se habría negado a alquilarle el kayak y él, insistente, habría pagado más dinero por comprarlo y salir al mar, que no estaba en condiciones para la navegación, más, si cabe, a esas horas de la madrugada.
Ante todos esos testimonios, el Código Procesal de Tailandia permite a los abogados hablar entre ellos, así como al imputado acercarse a los testigos para preguntar él mismo sobre lo que contestan, algo con lo que no se mostraba de acuerdo la acusación particular. Los abogados de la familia Arrieta no habían visto esto en otros sistemas y es algo que no ocurre en los juicios celebrados en España. Contrasta, por un lado, la formalidad de algunos aspectos relacionados con el juicio y lo coloquial de otros.
La pregunta de Daniel Sancho a la vendedora de cuchillos y la sorprendente respuesta del juez
El miércoles estaba citada a declarar la vendedora del establecimiento donde Daniel habría adquirido los cuchillos y la sierra. En ese momento, según informaba Álvaro López Serrano en el programa 'Vamos a ver', el acusado se habría levantado, acercado a la testigo y le habría hecho una pregunta para pedirle un matiz importante. El canal de 'Youtube' 'Triun Arts' analiza también esa cuestión y siempre según las fuentes consultadas por los medios que han adelantado la información, se habría formulado de la siguiente manera: "¿No es más cierto que en su tienda el cuchillo que me compré era el único para abrir cocos?".
Fue en ese momento cuando, según el citado periodista desplazado a Tailandia, el juez no habría esperado a que la comerciante tuviera la oportunidad de responder a Sancho. Tajante y sin rodeos, le habría dicho que esa pregunta "no es procedente". Después de ello llegaría la cruda respuesta del magistrado y que sentenciaría al imputado antes de tiempo en alguno de los hechos, ya que presuntamente le habría dicho que "muchos de la sala conocemos para qué utilizaste esos cuchillos". Llama la atención que se puedan producir esas preguntas desde el banquillo del acusado y, por otro lado, que la autoridad pudiera emitir, de ser verdad lo que cuentan las fuentes, un juicio de valor en ese punto.
El citado 'youtuber' va más allá en su análisis y es que también se ha hablado de la reacción que habría tenido la vendedora, que al acercarse Daniel a ella para realizarle la pregunta de la que venimos hablando se habría asustado al ver cómo se acercaba: "ella se ha asustado y se ha echado para atrás, porque me imagino la imagen que tienen de él allí en Tailandia", ha comentado. "Los testigos que vienen a declarar en la Corte reciben una compensación de, aproximadamente, unos 12 euros", ha comentado, por otro lado, el reportero del programa que presenta Joaquín Prat.
La presencia constante de Rodolfo Sancho en el juicio
Rodolfo Sancho viajaba a Tailandia pocos días antes del comienzo del juicio. El actor ha querido acompañar a su hijo durante todas las sesiones del proceso. Sonriente y muy relajado, Sancho aparentaba normalidad en todo momento. El intérprete tan solo tenía un momento de tensión con la prensa a su llegada a la Corte. Molesto por la presencia de las cámaras, pedía que no se le grabase y se le dejase pasar hacia el tribunal. Es un momento complicado para el padre de Daniel Sancho. Su hijo se enfrenta a una más que posible condena a pena capital por el supuesto asesinato de Edwin Arrieta.
Sancho se ha mantenido en sala durante todas las sesiones. De hecho, gracias al código procesal tailandés que permite que el imputado intervenga en el juicio, el actor ha sido protagonista de uno de los instantes más tensos. Daniel Sancho, escuchando las versiones de los testigos, se giraba hacia su padre, según detallaban reporteros desplazados a Koh Samui, para decirle que estaban mintiendo. El apoyo de Rodolfo Sancho hacia su hijo ha sido férreo y constante desde el primer momento. El actor se ha desvivido por facilitar la estancia del joven en la isla y proveerle de la mejor defensa jurídica posible.