El conflicto de Rocío Carrasco con toda su familia, lejísimos de en punto muerto, está más vivo que nunca. Un fuego reavivado con la Semana Cultural Rocío Jurado, que se celebra cada año en Chipiona, y por la que la familia de la más grande sigue esforzándose para hacer de esta cita una de las más importantes del verano. Todos menos Rocío Carrasco, que este año, y una vez más, ha vuelto a plantar a los suyos sin aparecer por el acto homenaje a su recordada madre.

A la presentación de la Semana cultural de Rocío Jurado acudieron Gloria Camila, Ortega Cano, el hijo pequeño de este, José María, y los hermanos de la más grandes, Gloria y Amador. Una reunión del núcleo fuerte de la desaparecida cantante que evidenciaba, una vez más, la ausencia de su hija mayor, y también, en esta ocasión, de su cuñadísima, Rosa Benito.

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La ex mujer de Amador Mohedano se ha enfrentado a duras críticas estos días por su ausencia pero ha acallado bocas participando en uno de los actos clave del evento. "Qué bonito hablan todos de ti Rocío. Qué gran legado has dejado, no solo en la música, también en lo personal. Cuántas cosas me vienen a la cabeza de vivencias a tu lado. Sabes una cosa Rocío, que tú nunca morirás, ¿sabes por qué? Porque las diosas nunca mueren, y tú lo eres", ha escrito la madre de Rosario Mohedano en Instagram.

Unas palabras llenas de sentimiento que no han quedado ahí, y es que Rosa Benito tenía este martes más cosas que decir de su cuñada, con la que trabajó durante años y a la que quería como una hermana. Así, ha compartido un vídeo del museo (de la discordia) de la chipionera. "¡Qué injusto que esto esté cerrado aún! Un museo que lleva 8 años sin que todas esas personas que adoran a Rocío, mi Jurado, puedan ver esa maravilla. Ella solo quería que su museo estuviera en Chipiona.... ¡Su Chipiona!", ha escrito la ex mujer de Amador Mohedano en Instagram. Y ha terminado: ¡Moderno a día de hoy! Le pese a quien le pese".

Palabras al aire que tienen una clara destinataria, su sobrina Rocío Carrasco. El museo de Rocío Jurado ha sido el centro de la disputa familiar desde hace años, en un eterno punto de partido los Mohedano, así como el viudo de la artista, José Ortega Cano, han defendido que las pretensiones económicas de la hija de Rocío y Pedro Carrasco, la gran heredera del legado de la artista, han dificultado la apertura.

La desesperación e incertidumbre sobre el futuro del museo de la chipionera sigue alimentándose y la comunicación con Rocío Carrasco inexistente, ¿habrá respuesta tras el golpe en la mesa de Rosa que finalmente ha tomado cartas en el asunto? Si nos fijamos en los antecedentes, no parece posible...