Wimbledon es una de las citas más especiales para Kate Middleton. La princesa de Gales ha tomado este torneo como uno de los eventos más importantes de su agenda de compromisos. En parte porque ostenta el título de patrona real del All England Lawn Tennis and Croquet Club, un nombramiento que recibió de la reina Isabel II. Pero también porque fue uno de los primeros eventos que realizó tras someterse a un tratamiento contra el cáncer. Es por eso que no es de extrañar que la princesa haya querido acudir dos días seguidos a esta competición.
Ayer, sábado 12 de julio, Kate llegaba en solitario con un impecable look blanco formado por una falda plisada y una blazer de color blanco con cinturón que estilizaba su figura. El tradicional lazo con los colores del club aportaba un toque de color al estilismo. Muy sonriente, Middleton saludaba a los asistentes y reaccionaba con agradecimiento a la gran ovación que le dedicaron. Debbie Jevans, presidenta de AELTC, se mantuvo al lado de la duquesa de Cambridge en todo momento.
Tan solo 24h más tarde, la futura reina ha vuelto al estadio, esta vez acompañada de su marido, el príncipe Guillermo, y sus hijos, George y Charlotte. En contraste con el look de ayer, Kate ha elegido un fluido vestido azul eléctrico.
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De manga corta y con un sutil cinturón en la misma tonalidad, esta prenda destacaba por un llamativo lazo en el hombro izquierdo de la princesa. En el otro, como no podía ser de otra manera, el mencionado lazo. En cuanto a joyas, la futura reina ha elegido un gran collar dorado con cadena ancha y un aro grueso. Un sencillo reloj y unos pequeños aros de oro cerraban la elección de bisutería de la princesa.
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Guillermo y George han lucido dos trajes a medida de estilo clásico y con el azul marino como protagonista. Mientras que el joven príncipe optaba por llevar pantalón y americana de la misma tonalidad, Guillermo prefería usar unos pantalones blancos.
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En cambio, la princesa Charlotte ha roto esta tonalidad con un romántico vestido blanco de falda plisada. Los hombros estaban marcados por unos volantes que continuaban por el torso de la prenda y estaban delineados por ribetes negros. Además, la pequeña ha recogido su larga melena en una preciosa trenza.
La importancia de Wimbledon
Además de los motivos expuestos, el torneo de Wimbledon supone un gran beneficio para la princesa de Gales. La revista Lecturas ha querido analizarlo con la experta en protocolo y etiqueta María José Gómez Verdú. "La presencia de la princesa de Gales en Wimbledon se ha convertido en uno de los momentos más esperados del verano británico. No se trata solo de una tradición personal o familiar", comenzaba la experta.
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Y es que, al margen de que haya sido un papel que la fallecida reina le otorgó, la princesa ha hecho suyo este acto. "El rol de Kate Middleton ha ido ganando peso simbólico y mediático año tras año, hasta el punto de que su aparición en Wimbledon se percibe hoy como un acto institucional de primer orden", expresa la profesional.
Concretamente, fue en 2021 cuando su figura se convirtió en un elemento esencial de este torneo. "Antes de que Kate asumiera este papel, el rostro habitual en la entrega de trofeos era el príncipe Eduardo, duque de Kent, primo de la reina y presidente del All England Club durante más de cinco décadas. Su figura, discreta y elegante, estuvo al frente de esta función durante décadas", explica María José.
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Pero se retiró. "Desde entonces, ha sido la princesa de Gales quien ha asumido el protagonismo en las ceremonias de premiación, dotando a este momento de una renovada vitalidad y proyección mediática", comentaba la experta. Además, la futura reina ha logrado "imprimir su propio estilo". Es en esta competición donde "encuentra un equilibrio único: formalidad institucional y cercanía personal".
Esto último lo consigue porque, a diferencia de otros eventos, la princesa no tiene que guardar unas formas totalmente estrictas. Es cierto que en su llegada, saludos y entrega de premios debe seguir el protocolo, pero durante el partido Kate se permite ser una fan más. No solo eso. Middleton aprovecha estos momentos para charlar con sus acompañantes, como su hijos, su marido, su hermana Pippa o, en su momento, Meghan Markle.