Te proponemos hacer este test:
¿Tienes un desarreglo?
¿Has aumentado de peso rápido sin variar la dieta?
¿Tienes exceso de vello en la cara?
¿Padeces cambios de humor frecuentes?
¿Sueles tener sensibilidad o dolor en las mamas?
¿Sufres migraña?
¿Te han diagnosticado ovario poliquístico?
¿Tienes insomnio?
Si contestas sí a 3 de estas preguntas es posible que tengas un desarreglo hormonal. Los problemas más frecuentes suelen deberse al exceso de estrógenos (hormonas femeninas) o de andrógenos (hormonas masculinas). Puedes sospechar de las hormonas femeninas si notas tensión en las mamas o sufres alteraciones en tu estado de ánimo. En cambio, si se trata de las hormonas masculinas puedes notar, por ejemplo, un aumento del vello corporal. Pide cita a tu médico para que pueda comprobarlo con un análisis de sangre.
La hinchazón abdominal y la sensación de pesadez son dos síntomas frecuentes de la fluctuación hormonal durante el ciclo menstrual. Pero no los únicos. Durante estos 28 días los cambios del sistema hormonal influyen en todo nuestro organismo, desde en cómo nos sentimos hasta en nuestros niveles sanguíneos.
Días 1 al 13: Llena de energía
Los estudios han visto que nos volvemos más impulsivas durante las primeras semanas del ciclo por el aumento de estrógenos. Puedes aprovechar para hacer esas tareas que más pereza te dan pero también ten en cuenta que aumenta el riesgo de caerte o cortarte. La subida de estrógenos para prepararnos para la ovulación también afecta a la sangre, haciendo que suban los niveles de colesterol bueno. Tras la ovulación, los niveles de colesterol malo van bajando progresivamente hasta la menstruación. Por eso, el mejor momento para hacer análisis de sangre es antes de tenerla.
Días 14 y 15: Más sexy
Te sentirás más atractiva, sexy, todo te sentará mejor y te brillarán los ojos. También puedes sentirte más atraída por los hombres, según un estudio de la Universidad de Nuevo México. Pero estarás más distraída y tu concentración disminuirá.
Días 16 a 28: Más irritable
La progesterona aumenta y eso intensifica los síntomas de dolor y sensibilidad. Si sufres síndrome premenstrual también te puedes sentir más confusa, irritable, o sufrir cambios en el estado de ánimo, insomnio y cansancio. Durante estos días, mejora la alimentación y haz ejercicio suave.
El mejor momento para...
Hacer dieta. Tras la regla tendrás menos ansiedad y será más fácil seguirla.
Ir al ginecólogo. También es mejor hacer la exploración después porque hay menos alteraciones hormonales.
Depilarte. Tras el periodo duele menos.
Correr. Después de la regla te sentirás más ligera y con más ganas.
Poner orden en casa. Antes de la ovulación tendrás más energía.
Ir de compras. Durante la ovulación todo te sentará mejor.
Así te influyen
Ghrelina. Es la que estimula el apetito.
Leptina. Manda mensajes de saciedad al cerebro.
Insulina. Transporta la glucosa a los tejidos. Es la que te da energía.
Cortisol. Te pone en marcha, pero si el estrés libera demasiado, acumulas grasa en el vientre.
Melatonina. Se encarga de que duermas bien.
Serotonina. Mejora tu humor y ayuda a dormir mejor.