Nadiuska, la mujer frente al escándalo: Destape, relaciones prohibidas y un marido por 30.000 pesetas

Con ella llegó al escándalo. Nadiuska (71 años), nacida Roswicha Bertasha Smid Honczar, llegó a España sin hablar una sola palabra de castellano y conquistó al país entero. En los 70 fue una de las actrices mejor pagadas y puso cara y cuerpo a una época cinematográfica que aún sonroja a los puristas. El Destape fue Nadiuska y Nadiuska fue el Destape, con películas como ‘Señora Doctor’, ‘Mi marido no funciona’ o ‘Zorrita Martínez’; la actriz, de origen alemán, fue una verdadera estrella de su época.

Convertida en un mero objeto al servicio del entretenimiento, en los años 90, tras un cuarto de siglo de carrera, acabó relegada y, con ello, el misterio. Nadiuska se desvaneció. Ingresó en un centro psiquiátrico y hasta el día de hoy. Su historia es la de un juguete roto que se usó hasta quedar inservible y que, cuando ya no se quiso más, se tiró al cajón del olvido. 

Los misterios que rodean a esta mujer de ojos de gata son innumerables y Valeria Vegas ha querido abordar algunos de ellos en ‘El enigma Nadiuska’, su último documental para Atresmedia. En él aborda cómo Roswicha pasó de ser de uno de los rostros imprescindibles de la industria del show business a desaparecer de la faz de la tierra. 

La actriz, que todavía está viva, es el producto de una época en la que las mujeres con un determinado físico solo podían valer para una clase de personajes y papeles. Encasillada hasta decir basta, tuvo una de las carreras más prolíficas. “Solo he trabajado y he luchado por mi profesión”, dijo a José María Íñigo en uno de los momentos de mayor éxito. No mentía. Nadiuska encadenaba proyecto tras proyecto. Solo en el año 1976 filmó 6 películas y todo esto sin manejar el idioma. 

La industria la creó y, cuando ya no le sirvió más, la industria la rompió. Y esa caída en desgracia dejó a la interprete profundamente tocada. De hecho, aún sigue internada en un centro psiquiátrico.

¿Con qué famosos estuvo Nadiuska?

“La primera piedra con la que Nadiuska se topa es con su representante Damian Rabal, hermano de Paco”, cuenta Valeria Vegas en ‘A vivir que son días’, en la cadena Ser. Su manager, que se encargaba de llevar las carreras de algunos de los nombres más importantes de la industria, la dejó caer en el mismo momento en el que ella acabó con esta relación que iba más allá que lo estrictamente profesional. Un romance que, aunque nunca fue confirmado, era un secreto a voces dentro de los profesionales de la industria del entretenimiento. Tras ello, “las puertas que se le habían abierto, se le fueron cerrando”. Y ahí tocó fondo por primera vez. Se vio humillada y algo dentro de ella se rompió. Este fue su primer ‘encontronazo’ con los problemas de salud mental. 

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La vida de Nadiuska era un auténtico cóctel explosivo que amenazaba con llevársela por delante en cualquier momento. Compartió vida con algunos de los hombres más poderosos del entretenimiento, pero también del poder. A finales de los años 90 se atrevía a pronunciar uno de los nombres que más tiempo llevaba callando, Juan Carlos I, Rey de España. De él decía que era ���su novio” y, de nuevo, en una versión que recordaba a la que años más tarde también acabaría pronunciando Bárbara Rey o Corinna Larsen, algunas de las mujeres que han pasado por la vida del anterior monarca, aseguró que la gente de su circulo “querían deshacerse de ella porque no les gustaba que estuviéramos juntos”. Entonces, Nadiuska vivía en el castizo barrio de Chamberí, en Madrid, y las ventanas de su piso estaban cubiertas por sábanas negras, “para que no me descubran”. 

Nadiuska, la mujer más deseada que tuvo que pagar para casarse

Hombres poderosísimos capaces de destruir la carrera (y la vida) de una persona con un chasquido de dedos. Pero por la vida de Nadiuska también pasaron otros hombres de lo más inofensivos. De hecho, en el año 1973 se casó con uno de ellos.

Tal y como recoge uno de los números de Lecturas de ese mismo año, la actriz había pagado 30.000 pesetas a un enfermo oligofrénico para obtener la nacionalidad española. “Yo no he engañado a nadie, fue él quien me ocultó su enfermedad”, dijo para defenderse.

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Fernando no sabía ni leer ni escribir y solo sabía que le iban a pagar por casarse con una mujer para que esta pudiera trabajar en España. En la licencia de matrimonio, al lado de la esmerada firma de ella, figuraba una X como única rúbrica de él. A ella la acusarían de fraude matrimonial y él argüiría en su defensa que lo hizo solo “para que no mandaran a Rusia a la señorita”. 

¿Dónde se encuentra Nadiuska ahora?

En 1977, Lecturas publicaría que Nadiuska había perdido el bebé que esperaba. “Un niño del que no se conocía el padre y que, como es habitual en ella, todo está envuelto en brumas”. 

Con los años 90 llegó el declive. Su salud mental pendía de un hilo y la idea de la muerte empezó a estar muy presente. “Para mí no fue una pionera del Destape fue una pionera de la salud mental”, dice de ella Valeria Vegas, que rescató del olvido a Cristina ‘La Veneno’ y le devolvió el brillo de su última época. 

Nadiuska tuvo varios intentos de acabar con su vida, fue medicada e ingresada en diferentes hospitales y acabó completamente fuera de la realidad que la había encumbrado al éxito. Desde hace años, la cuidan las hermanas del sanatorio de Cienpozuelos, donde ya no queda nada de lo que un día fue y que, entre  todos, le acabaron arrebatando.