“En el vídeo podrás ver la magia de la reina Letizia”. Es esta una de las frases que más llama la atención del último artículo que el periódico ‘Bunte’ ha dedicado a la reina. La prensa alemana se rendía, una vez más, a los encantos de la esposa de Felipe VI en una de sus apariciones más reciente. En las imágenes, claro, los distintos looks de Letizia en sus apariciones en público y los detalles que más les han llamado la atención. La proyección de la reina fuera de nuestras fronteras es cada vez mayor. Casi imparable.
Hace tiempo que la reina se ha convertido en el valor seguro de la Casa Real española. Es quien más titulares ocupa, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, y no solo por su presencia. Sus discursos, sus gestos o las férreas causas que defiende son destacadas por periodistas y expertos. También las polémicas que han rodeado a su familia, tanto natural como política. Letizia interesa hasta a Victoria Beckham. Las palabras de la diseñadora alabándola todavía resuenan en los círculos de la alta moda internacional.
Y como toda buena figura analizada al detalle, hay cosas que solo se perciben desde el extranjero. Tras sus últimas intervenciones, la prensa alemana ha querido centrarse en un aspecto que aquí tenemos ya más que interiorizado. Una seña de identidad de la reina que viene y va a su libre antojo. ¿Qué piensa Letizia de todo esto?
El detalle de la reina Letizia que más interesa a los alemanes
En su pormenorizado análisis, el periódico ‘Bunte’ se fija en las canas de la reina. No es nada nuevo, claro. Desde que Letizia tomó la decisión de no teñirse el cabello, se ha glosado sin fin la aparición -y desaparición- de los mechones grises de la reina. En un intento más poético que periodístico, los alemanes han bautizado estas canas de la reina como sus “hilos plateados”. Los mismos de los que no se vio ni rastro en sus últimas salidas al extranjero.
Tal y como ya publicó Lecturas hace tiempo, la reina recurre a baños de barro para mitigar el brillo de sus canas cuando tiene un evento importante por delante. Así nos lo confirmaron varios expertos tras analizar los cambios radicales en la melena de la reina. Especialmente llamativo fue en los últimos Princesa de Asturias, donde Letizia pasó a lucir canas de la noche a la mañana. Un misterio que también inquieta fuera de nuestras fronteras.
La ausencia de canas en los últimos actos que ha protagonizado, algunos en la visita de Estado a Países Bajos, se han convertido en el tema favorito de los medios alemanes. Por encima del estilismo e incluso de la dolencia de pies que padece, es el cabello de la reina lo que llama la atención de la prensa, tanto la centrada en belleza y cosmética como los medios generalistas. Letizia interesa a muchos niveles.
Las contadas ocasiones en las que el rey Felipe ‘eclipsa’ a la reina Letizia
No siempre es la reina quien asume todo el protagonismo en los actos internacionales de los monarcas. Resulta curioso que el rey Felipe logre, en momentos muy contados, pasar por encima de la enorme popularidad de la reina. Mientras la prensa británica, francesa o alemana siempre se decanta por analizar a la reina, cuando topamos con medios holandeses o daneses, es el rey quien se lleva la atención.
La aceptación de la monarquía en países como Dinamarca, cuyos sondeos tras la coronación del rey Federico alcanza más del 70%, hace que sea la figura del rey la que esté en el centro de la noticia. Algo parecido a lo que ocurrió con el último viaje de Estados de Felipe y Letizia con Guillermo y Máxima de Holanda. Fue la espontaneidad del rey y su naturalidad lo que terminó ocupando las paginas ‘royal’ de periódicos y medios. También la reina, pero en menor medida.
El tirón mediático que conlleva la presencia de los reyes Felipe y Letizia es solo comparable con la repercusión que sigue teniendo la Casa Real británica. El ‘affaire Kate Middleton’ paralizaba el mundo como nunca antes se había visto. Tanto el rey Carlos como los actuales príncipes de Gales o Harry y Meghan Markle son noticia diaria y constante en todos los países. Nadie puede con la monarquía británica.