Las aplicaciones de citas pueden ser un gran alidado en la búsqueda del amor. Son el lugar perfecto para conocer a gente nueva. Sin embargo, no todo el mundo tiene suerte en ellas. José Miguel (50 años) ha preferido recurrir a 'First Dates' para que le ayuden a encontrar a alguien con ganas de divertirse y estar bien. "Las redes sociales han sido un fracaso. Será que no soy fotogénico o lo que sea", ha reconocido a Carlos Sobera (64 años).
El chef de Zaragoza es un apasionado del estilo surfero, aunque también es rockero. Está dispuesto a encontrar el amor, pero, sobre todo, está orgulloso de su cabellera. "Me siento poderoso con mi melena", ha confesado. Justo ese ha sido también el motivo por el que su cita se ha ido al traste.
El equipo de 'First Dates' ha considerado que haría buenas migas con Arantxa (45 años), y una primera instancia así lo ha parecido. Comparten oficio, lugar de residencia y la preocupación por sus hijos. "Hay veces que la gente que no tiene hijos no llega a comprender el porqué se ponen malos y te han fastidiado una salida... Circunstancias de los hijos", ha dicho al llegar al dating show. Se ha definido como una mujer con muchas ganas de enamorar y que la enamoren, con muchas ganas de sentir y disfrutar la vida: "Es que son cuatro días".
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Pese a que sobre el papel todo estaba bien, la primera impresión para José no ha sido buena. "Arantxa es muy grande. Yo soy muy grande, no gigante, pero sí grande, y me he quedado pequeñito a su lado", ha comentado a las cámaras de 'First Dates' tras verla. No le faltaba razón. Él mide 1'83 centímetros; ella, 1'85 sin tacones. "No soy tan bajito. Esto no me ha pasado nunca, pero es que me quedo pequeñito a su lado", ha insistido. Para la zaragozana el panorama no ha sido mucho mejor. El objeto de sus críticas ha sido eso de lo que el chef está tan orgulloso, su cabellera. "Ese pelo así rubio de bote creo que no le queda bien", ha señalado.
Ella buscaba un moreno y se ha topado con un rubio. Esa ha sido la primera de las discrepancias de la cita. No han coincidido en gustos gastronómicos, tampoco en los musicales. "Me gusta de todo, lo comercial... Lo que no tolero es el rock puro. No me gusta", ha confesado. La cara de José ha sido un poema. "Pues yo quiero a un concierto de Iron Maiden", le ha contestado para dejar claro que en eso tampoco están de acuerdo. Eso sí, educación no ha faltado. "Arantxa me ha parecido supermaja y super simpática, pero no tenemos en común absolutamente nada", ha reconocido entre risas.
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Si la cita ya era tensa, la situación se ha tensado un poco más con los enunciados que han tenido que leer en el bingo de 'First Dates'. Arantxa le ha preguntado si ha cumplido sus expectativas. Ha sido entonces cuando José le ha confesado que es demasiado alta para él. "Ha sido muy sorprendente", le ha confesado. A las cámaras del dating show, ha insistido ni la altura ni el físico son importantes para él. "Pero sí que tiene que haber unos cánones que a mí me encajen", ha añadido.
La zaragozana ha aprovechado la situación para dar su opinión. "Pues yo pedí un moreno y me han traido un rubio", ha confesado. "¡Y teñido!", ha añadido entre risas su cita. José ha leído entre líneas y se ha tomado este comentario como una declaración de intenciones: "Me estaba diciendo que no le gusto".
El tema en el que sí que han estado de acuerdo ha sido en los hijos y José, además, ha tenido el detalle de invitar a Arantxa. ¿Tendría solución esta cita? La respuesta ha sido un doble 'no'. Ninguno de los dos ha accedido a una segunda cita. "No tenemos nada en común ni buscamos lo mismo. No estamos en la onda. No sé, somos muy diferentes", ha zanjado José. Les toca seguir buscando el amor.