Eh, notición. Uno que estaría dispuesto a escribir sus memorias es Enrique García Vernetta, ahora que se cumplen diez años de la muerte de Rocío Jurado. Pocos se han acordado tanto de ella como Enrique, su primer novio, su primer amante, ¡su gran amor! Sí, y digo gran amor por mucho que le pese a Gloria Camila. Ortega Cano sabe que, aunque no le guste, estoy diciendo la verdad. Lo de Rocío y Enrique fueron doce años de pasión pura que solo terminaron porque él nunca pronunció la palabra matrimonio, pero aun así, ella continuó enamorada de Vernetta incluso casada con Pedro Carrasco ¡A veces lo llamaba para volver con él! Hoy Enrique, empresario de posibles, atleta sexual e irresistible play boy, cuyo último cometido profesional fue representar a Mary Carmen y sus muñecos, vive con sencillez en Valencia y se acaba de operar de cataratas (por la seguridad social). Tiene su casa llena de fotos de Rocío, la llora todos los días sin necesidad de que sea su aniversario y dice que si alguna revista se interesa, él estaría dispuesto a contar la historia de ese gran amor. Oído cocina, jefe.
¡Momento! ¡Toque internacional, periodismo de investigación en esta página! ¿Alguien se acuerda de la princesa Corinna? ¡Sí, hombre, la amiga entrañable! Pues sigue vivita y coleando y si no se habla más de ella es porque, según el diario argelino 'Le matin', si no se la deja en paz amenaza con publicar todos los intríngulis de sus operaciones financieras en España, particularmente con Argelia, ya que ha guardado copia de los contratos. Que lo dice 'Le matin', yo ni entro ni salgo…
Y una tontería para terminar. Hablo con un querido amigo conocedor como pocos del universo 'Sálvame': “hasta en su forma de llorar se nota que es mala”. Sí, esa en la que están ustedes pensando (o no).