Irene Rosales no está pasando por su mejor momento. Las paredes de la casa de 'GH Dúo' empiezan a asfixiarla al sentirse aislada del exterior y, sobre todo, alejada de sus hijas. Aunque parecía estar aguantando bastante bien la distancia, la mujer de Kiko Rivera ha acudido al confesionario para desahogarse y ha reconocido que la experiencia se le está haciendo muy difícil: "Llevo dos días súper agobiada. La casa que se me está haciendo chica y el acordarme de mis niñas... Llevo dos días que solo quiero estar metida en la cama y estar pensando en lo de fuera para quitarme un poco de aquí en medio", ha explicado ante las cámaras.
La concursante, que ya tuvo un primer bajón cuando el programa les enseñó a ella y a Kiko fotos de las niñas con motivo del primer cumpleaños de Carlota Rivera, ha asegurado que no ni siquiera tiene ganas de relacionarse con los demás. "Es normal que te dé un bajón, pero todo se me hace chico, no quiero encontrarme ni con nadie de la casa, ni que me hablen ni nada... Pero bueno, será parte de la experiencia", asegura.
Kiko Rivera, por su parte, ve totalmente normal la situación de Irene Rosales, ya que hasta ahora nunca se había separado de sus hijas. Es más, le ha confesado a Antonio Tejado que él pensaba que se derrumbaría mucho antes: "A mí me está sorprendiendo, yo pensaba que Irene no aguantaba aquí ni dos semanas, porque no se separa de las niñas nunca. Yo pienso en mis hijos, pero yo estoy acostumbrado a viajar, siempre separarme cuatro días o cinco días", explica.