Las bromas pesadas están a la orden del día en ‘Gran Hermano VIP 7’. Con Hugo Castejón dentro de la casa, él era el objetivo de todas ellas, aunque el concursante no fuera consciente hasta que se fue de Guadalix. Sin embargo, ahora la diana es otra persona.
Alba Carrillo ha sido la última en organizar una pesada broma contra el resto de sus compañeros. Algo que ha afectado (y mucho) a Adara, quien no creía que su compañera le estuviera tomando el pelo. En concreto, la ex de Feliciano López estaba planeando llenar el jacuzzi cuando el Super la llamó para ir al confesionario. Muy extrañada por la llamada, el resto le recuerda que la habrá avisado porque es la líder de la casa.
![Alba Carrillo](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 900 497"%3E%3C/svg%3E)
Tras hablar con el Super, Alba vuelve con sus compañeros y cuenta que tienen que decidir quién de ellos va a recibir una visita. David renuncia a la suya y, mientras el resto continúa debatiendo, Carrillo suelta la bomba: ¡Es una broma!
En realidad, Alba había estado hablando con el Súper de cómo iban a repartir las tareas de la casa de forma definitiva. Algo que al resto de sus compañeros no le ha sentado nada bien. En especial, Adara ha sido la más afectada. La concursante se ha ido sola al baño y Antonio David la ha seguido, al intuir que le había afectado lo sucedido. Y sí, Molinero estaba destrozada, por lo que el malagueño no ha dudado en animarla. El ex guardia Civil le ha dicho que se retoque “y a la guerra”.
No es la única broma
Durante su paso por el programa, Hugo Sierra se convirtió en el objetivo de todas las bromas pesadas. Vinagre en el zumo, sal en el café o masajes con un rodillo de cocina en su papel de cliente por parte de los criados no pasaron desapercibidos para nadie. Unos hechos que les valió una buena reprimenda por parte de Jordi González.