La entrevista de Meghan y Harry en 8 bombazos: peleas, suicidio, mentiras, racismo...

La presión de la prensa y la falta de apoyo por parte de la familia real británica le llevaron a creer que su desaparición "sería lo mejor para todos". "Ya no quería vivir más", le confesaba entre lágrimas a Oprah Winfrey. 

En un alarde de sinceridad, Meghan le confesaba a la presentadora que desde la Casa Real le manifestaron su "preocupación" por el tono de piel que tendría Archie. "Hubo preocupaciones y conversaciones sobre cómo de oscura podría ser su piel. Me lo transmitió Harry de las conversaciones que la familia tuvo con él", recordaba ante la mirada atónita de Winfrey quien, un día después, se ha encargado de aclarar que ni la reina Isabel II ni el duque de Edimburgo fueron los miembros de la institución que pronunciaron dichas palabras.

Siempre ha sido voz populi la mala relación que existía entre Kate y Meghan pero no ha sido hasta ahora cuando la segunda ha contado su versión de los hechos. La duquesa de Sussex confesó que fue la mujer de Guillermo quien estaba "molesta por el tema de los vestidos de las damas de honor", y añadió que lejos de lo que se publicó "fue ella (Kate) quien me hizo llorar e hirió mis sentimientos". Sin embargo, la sangre no llegó al río y la duquesa de Cambridge se disculpó y le envió flores. Pero asegura que sí le molestó que nadie dentro de la Institución aclarase la información a la prensa.

Hasta este domingo, el 18 de mayo de 2018 estaba marcado en el calendario como el día de la boda de los duques de Sussex pero nada más lejos de la realidad. Celebrado en la capilla de San Jorge del castillo de Windsor ante miles de invitados, nadie sabía que Harry y Meghan ya eran marido y mujer. Los duques se casaron tres días antes en el jardín de su casa: "Mira, este espectáculo es para el mundo, pero queremos nuestra unión entre nosotros", le dijeron al arzobispo. 

Harry ha reconocido que quiere con locura a su hermano pero "estamos en caminos diferentes". Eso sí, desea que esta relación que actualmente es "distante" pueda retomarse en algún momento: "El tiempo cura todas las cosas", declaraba el duque de Sussex.

Meghan Markle ha sido muy crítica con la familia real. En medio de la charla con Oprah Winfrey le expresó su malestar al no recibir ningún tipo de enseñanza por parte de la Institución, era ella quien se tomaba el atrevimiento de estudiar protocolo a través de Internet. "Quería que estuvieran orgullosos de mí", recuerda con sumo pesar. Muy curioso, es que fue Sarah Ferguson quien le enseñó a hacer la tradicional reverencia minutos antes de conocer a Isabel II: "Estuvimos practicando delante de la casa. Según dicen hice una reverencia muy buena. No me acuerdo".

Harry coloca en su gira australiana en 2018 el punto de inflexión en su relación con la Casa Real. "Eso trajo recuerdos. Fue demasiado ver lo fácil que fue para Meghan entrar en la familia y poder conectarse con la gente", manifestaba haciendo referencia a la imagen de Diana de Gales y su viaje a Australia junto al príncipe Carlos en 1983.