Acaban de llegar a Parfois y están arrasando: los nuevos vestidos blancos que parecen de novia (y son ideales para cualquier plan de verano)

El vestido de novia es uno de los detalles más cuidados de una boda. Plantear el diseño, la primera prueba o pensar en los complementos con los que lo combinarás es uno de los rituales previos a una boda más especiales. Sobre todo, si lo vives rodeada de personas importantes para ti que te hagan vivir el proceso de forma muy especial.

Aunque, por lo general, las novias suelan apostar por llevar un único vestido (tanto el precio como el no volver a llevarlo nunca más invitan a apostar por un único look), cada vez son más las que deciden cambiar de estilismo al llegar la fiesta. Bien por darle un cambio de aires al look, bien por no estropear la prenda o tener más libertad de movimiento, cuando llega la barralibre muchas renuncian al vestido con el que se han dado el sí, quiero, para recurrir a otros vestidos blancos, más semejantes a un look de invitada, con los que poder darlo todo en la pista de baile.

Quizás nunca nos hubiéramos planteado esta opción de no ser por las famosas e influncers, que algunas llegan incluso a apostar por tres diseños diferentes en el día de su boda. Ellas, quizás, por postureo, el común de las mortales por estar más cómodas en la fiesta. Para evitar que el estilismo se confunda con cualquier look de invitada, la opción de estilismo para la fiesta también debe ser blanca, pero esta vez, no tiene por qué ser tan sobria.

Bastante económicos y muy acorde a la tendencia de looks de novia para la fiesta de después, Parfois ha lanzado una pequeña colección de diseños blancos que pueden convertirse en la alternativa perfecta para aquellas que quieren cambiar de look cuando llega la barralibre. Te contamos cómo son.

Claves para acertar con el segundo vestido de novia

La elección del vestido de novia es algo muy personal. Las tendencias pueden ayudarte a la hora de saber qué se lleva y qué no, los estilismos que han llevado las famosas o influencers pueden servirte de inspiración, pero, al final, la última palabra la tienes tú. Da igual lo que se lleve o lo que se hayan puesto otras antes, tu vestido de novia debe ser la elección más personal de look de tu vida. Debes sentirte cómoda, y no sólo en lo que a funcionalidad se refiere, sino al estilo con el que te sientas identificada. Por eso, el vestido que elijas para darte el sí, quiero no debe estar elegido de manera aleatoria. En el caso del segundo look, si decides apostar por él, puedes dejarte llevar más por otras cuestiones, pero siempre teniendo en cuenta algunos detalles.

• La comodidad es fundamental: Aquí sí pensamos en la funcionalidad porque en la barralibre lo que quieres es poder moverte a tu antojo y bailar sin parar. Olvida la pomposidad y los artificios y busca diseños que te resulten cómodos de llevar y con los que puedas ser esadiva valiente y poderosa que se coma la pista de baile.
• Una pieza versátil: Ya que el primer vestido de novia no lo vas a volver a usar jamás, plantéate que el segundo look puedas usarlo en otras ocasiones. Al final, un vestido blanco es un must del verano y nada como salir a cenar un viernes y ponerte el diseño con el que lo diste todo en el día de tu boda.
• Que seas tú misma: Esta premisa es aplicable a cualquier look porque no hay nada mejor para vernos guapas y favorecidas que llevar una prenda que nos represente, que sea fiel a nuestro estilo.
• El precio: Es probable que tu primer vestido de novia (lo hayas comprado tú o haya sido regalo de algún familiar), tenga un precio bastante elevado, así que para el segundo look, apuesta por una pieza un poco más económica.

Así son los vestidos de Parfois que puedes convertir en tu segundo look de novia

Algunos nos recuerdan a estilismos nupciales que han lucido algunas influencers, salvando las distancias, y otros son ideales para llevarlos cualquier día de verano en el que quieras ir más mona. La idea al fichar estos vestidos es que puedas darlo todo en la barralibre, pero que el diseño no se convierta en una prenda más que colgar en el armario y despedirte de ella para siempre. Pueden (y deben) tener mucha vida después de la boda.

• Vestido blanco y asimétrico

Con el escote asimétrico, ajustado y drapeado, este vestido blanco se antoja perfecto para darlo todo en la fiesta de tu boda. Incluso puedes ponerte un calzado plano para estar más cómoda. Si llevas el pelo recogido suéltalo para darle un aire relajado y bohemio.

Vestido blanco y asimétricos, 89.99 euros. Ref: 234500

• Vestido blanco con pliegues

Como si te hubieras casado en Ibiza, este vestido es ideal para la fiesta de las novias más minimalistas y bohemias. Lo puedes combinar con unas sandalias de tiras y tacón en dorado y llevar una trenza deshecha lateral.

Vestido blanco cortito, 119,99 euros. Ref: 233642

• Vestido blanco de plumas

Muy setentero, este vestido tipo babydoll puede aportarle a tu segundo look de novia cierto aire naíf con el que sentirte muy cómoda y favorecida. Combínalo con unas cuñas de esparto en el mismo color y relaja tu recogido dejando mechones sueltos alrededor del rostro.

Vestido blanco de plumas, 45,99 euros. Ref: 225362