Iñaki Barredo, abogado experto en sucesiones: “No confundas el testamento con la adjudicación de la herencia, es un error muy habitual que cuesta dinero y toca pagar más impuestos”

El experto ha lanzado una importante advertencia para evitar costes extra sobre la última fase de toda herencia: la adjudicación.

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Planificar con tiempo un testamento un puede ahorrarnos muchos quebraderos de cabeza. Así lo confirma el abogado experto en sucesiones, Iñaki Barredo. No es una decisión que debamos tomar a la ligera ni mucho menos. De hecho, lo más inteligente es organizar y planear qué ocurrirá con nuestro patrimonio antes de morir. Quién lo heredará y cómo se repartirá es clave para el resto de los familiares. Nunca es pronto para redactar un testamento y evitar conflictos en el futuro. De lo contrario, se aplicarán las normas del Código Civil y no podrás elegir qué ocurre con tu legado ni de qué forma se reparte. Eso sí, antes de hacerlo debes tener en cuenta varios elementos para evitar el error más común.

Iñaki Barredo advierte sobre la última fase de una herencia: la adjudicación

Tener un testamento escrito antes de morir es fundamental para evitar problemas financieros o familiares en el futuro. También es un procedimiento clave para ahorrar en trámites y costes. Aun así, es una decisión que se debe tomar con calma. Iñaki Barredo, abogado experto en sucesiones, advierte. Existe “un error muy caro a la hora de adjudicar una herencia como dice el testamento”. Según el experto, es “muy habitual” y “genera impuestos por tener que pagar más en la gerencia”.

Se trata de “tener un testamento genérico en el que el fallecido nombra herederos universales por iguales partes a sus hijos”. Aunque parece un procedimiento ideal y correcto para muchos, no siempre es la mejor opción por un motivo. “¿Cuál es la creencia errónea? Que tenemos que repartir toda la herencia a iguales partes entre los hijos. Es decir, que si el fallecido había dejado una vivienda, un coche y unos saldos bancarios, los tres hijos se tiene que adjudicar en copropiedad la vivienda, el vehículo y el saldo bancario de la cuenta y repartirlo entre los tres”, explica el abogado en una de sus publicaciones más recientes.

Lo cierto es que este modus operandi puede generar ciertos problemas en el futuro ya que existen varios elementos que podemos detallar en el testamento y para muchos pasan desapercibidos. “Una cosa es hacer el inventario de la herencia y dónde terminan los bienes, la vivienda, el dinero o el coche. Otra es la valoración de la vivienda, del coche y del saldo bancario que es fácil a fecha del fallecimiento. Y, por último, la tercera fase de una herencia es la adjudicación”, explica Iñaki sobre cualquier testamento. Es en el tercer proceso donde muchos cometen el gran error.

No tiene por qué ser a tercios. Es decir, que, si hay dinero suficiente, dos hijos se podrían llevar la casa y el otro se podría el saldo bancario más el coche. No hay necesidad de adjudicar a tercios o a iguales partes”, recomienda. La mejor opción es valorar con anterioridad qué partes pretende adquirir cada heredero y detallarlo en el testamento para evitar conflictos y costes adicionales en el futuro.

“¿Por qué digo que este error puede conllevar pagar más impuestos? Muy sencillo. El error habitual que es al adjudicarse los hijos la vivienda familiar en copropiedad y a los meses uno dice que va a pagar lo que corresponde de la casa a los demás. Pues ahí tienes que pagar el impuesto que corresponde por la extinción del diviso en copropiedad cuando lo podrías haber hecho en la escritura de herencia ahorrándote esos impuestos”, advierte. Su recomendación es clara.

No confundas el testamento con lo que tienes que hacer con la adjudicación de la herencia, es un error muy habitual, que como todos en las herencias cuesta dinero y toca pagar más impuestos. Tenedlo en cuenta”, sentencia. Este es uno de los casos más comunes que ocurren tras el reparto de las herencias. Iñaki ha sido testigo de ello y, por este importante motivo, recomienda a otros evitar caer en el mismo error que suponga un gasto extra para sus bolsillos.