Por fin entendimos el jueves por qué Isabel Pantoja amenaza con abandonar ‘Supervivientes 2019’ periódicamente. La isla le recuerda a ese sitio en el que estuvo encerrada en contra de su voluntad: la cárcel; una palabra todavía maldita para ella. Lo confesó en la zona de nominaciones un día después de sufrir un severo ataque de ansiedad en Cayo Paloma. Las imágenes eran tan sobrecogedoras que su hijo Kiko, desde el plató, decía que no quería verla así, y que deseaba que la aventura finalizara lo antes posible para ella. Entiendo a Kiko, pero también a la Pantoja, que está inmersa en una lucha contra su mente de la que creo que saldrá victoriosa. Nada como compartir tus miedos para que pierdan fuerza y te hagan menos daño.

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isabel pantoja

El pasado jueves, Isabel Pantoja dio un paso de gigante en su lucha contra ese pasado que la martiriza.Su incapacidad para pronunciar la palabra “cárcel” fue tan creíble como emocionante. Provocaban risa sus familiares y ella misma cuando se referían a la prisión como “ese lugar en el que estuve”, pero después de su explicación la risa se transformó en compasión. Incluso, en pena. La soberbia que ha caracterizado muchísimas de sus apariciones dio paso a una mujer desvalida suplicando auxilio emocional. La confesión de Pantoja en la zona de nominaciones me recordó al sentido monólogo de Rosa Benito que, curiosamente, se produjo en el mismo lugar. Benito ganó aquella noche su edición. Cuidado. Si Pantoja aguanta, tras lo del jueves pasado, es firme candidata a hacerse con el triunfo.