Si algo ha caracterizado la relación de Sara Carbonero (39 años) y Nacho Taboada (36 años) desde que comenzó, ha sido la discreción. Hace un año y medio que la presentadora y el músico comenzaron un noviazgo que, pese a ser muy comentado, ellos llevan de la forma más íntima posible. Un año y medio en el que se les ha podido ver juntos en momentos puntuales y en el que no han faltado los intercambios de cariño, pero siempre con esa actitud discreta que a ambos caracteriza. Al menos hasta ahora. Porque aunque mantienen su discreción, cada vez son más los gestos con los que se muestran románticos y sin importarles que el resto del mundo lo vea.
Es a través de Instagram como se puede ver ese cambio que han dado Sara Carbonero y Nacho Taboada a la hora de dar rienda suelta a su romanticismo. El último, las imágenes que han compartido de su escapada a París. La presentadora ha viajado hasta la capital francesa junto a su compañera, amiga y socia Isabel Jiménez. El motivo de este viaje ha sido grabar una campaña para Slowlove, la firma de moda que comparten. Pues bien, Nacho no lo ha dudado dos veces y les ha acompañado en esta escapada laboral.
El músico ha compartido en Instagram imágenes en las que se muestra muy orgulloso de Sara Carbonero. En las fotos y vídeos que ha publicado, se puede ver cómo es testigo del trabajo que realiza la presentadora en las calles de París, posando y mostrándose muy implicada con su proyecto de moda. La clara muestra de que a Nacho Taboada le encanta acompañar a su chica en estos viajes en los que le gusta gritar a los cuatro vientos su orgullo por cómo ella trabaja.
![Nacho Taboada y Sara Carbonero](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 2146"%3E%3C/svg%3E)
@taboada_nacho
Este no es el único gesto que Sara Carbonero y Nacho Taboada han intercambiado vía Instagram en las últimas semanas. En las publicaciones de uno y otro, se puede ver cómo se dejan comentarios. Emojis de corazones o palabras con las que alaban las imágenes que comparten, son algunas de esas muestras. Pero hay una que destaca sobre las demás.
El intercambio de palabras románticas de Sara Carbonero y Nacho Taboada
La semana pasada, Sara Carbonero acudió a un evento de UNICEF en el que tuvo oportunidad de saludar a la reina Letizia. La presentadora compartió en Instagram algunas fotos de este acto en el que mostró su lado más solidario. Nacho Taboada, dejó un comentario de lo más romántico. “Tu dedicación constante por nutrir el desarrollo emocional de los niños es maravillosa. Sigue siendo guía en todos esos valores fundamentales como el respeto y la empatía, tan necesaria en nuestra sociedad. Orgulloso de ti es poco”, escribió para que todo el mundo leyera el orgullo que siente por su novia. Algo a lo que ella respondió muy romántica. “Te quiero”, le contestó Sara en el que ha sido su mensaje más breve pero romántico hasta la fecha.
![Sara Carbonero](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 796"%3E%3C/svg%3E)
@saracarbonero
Sara Carbonero, un apoyo para Nacho Taboada en la música
Y si Nacho Taboada es un gran apoyo para Sara Carbonero en su carrera profesional, al contrario no es menos. Son varias las veces que se ha podido ver a la presentadora en conciertos ofrecidos por el artista o en algún evento relacionado con su trabajo como músico. Momentos en los que siempre ha intentado dejarle a él el protagonismo que requieren esos instantes, pero en los que no ha dudado en estar como testigo de primera mano, demostrando lo mucho que le apoya en su carrera y lo orgullosa que está de él.
Los momentos de Sara Carbonero y Nacho Taboada más allá del trabajo
A esto hay que sumar la cantidad de momentos de los que disfrutan juntos más allá del trabajo. Viajes y planes de diario con los que Sara Carbonero y Nacho Taboada disfrutan al máximo de un noviazgo discreto y afianzado al mismo tiempo. Este verano, han sido varias las escapadas que han podido hacer juntos para seguir sumando recuerdos a una relación de la que ahora han disfrutado en París y que no sería de extrañar que pronto expriman en otro destino idílico.