La reflexión más sincera de Sara Carbonero sobre los cambios a lo largo de la vida

Sara Carbonero ha compartido una sincera reflexión en la que se ha sincerado sobre los cambios que tienen lugar a lo largo de la vida

Sara Carbonero
Gtres

Si en algo se caracteriza Sara Carbonero (39 años) es por su discreción respecto a su vida privada. Es por eso que una de sus últimas publicaciones ha sorprendido a todos sus seguidores al revelar sus sentimientos, especialmente sobre la sensación 'mala madre' a la que ha hecho frente con un bonito y literario pensamiento. En el post en cuestión, Sara aparece con el pelo revuelto, mirando directamente a cámara y sentada en lo que parece un jardín en verano.

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"Hace tiempo que creo poco en las casualidades", empieza la periodista y continua explicando el motivo que la ha llevado a escribir este texto. "Hoy ha sido un día de esos que empiezan mal porque pierdes un avión y te sientes inevitablemente mala madre", cuenta Carbonero y explica que esa emoción viene de sentir "que no llegas a todo, que estás fallando". Aún así, parece que la presentadora no se ha rendido y "rápidamente remontas y buscas en tiempo récord el próximo vuelo y aquí estamos". Pero, ¿a dónde volaba Sara? Ella misma lo dice: "Hacía muchísimos años que no pisaba Galicia".

Sara Carbonero reflexión

Sara Carbonero comparte una profunda reflexión sobre la vida

Instagram @saracarbonero

Esta situación ha hecho que encontrar en la bandeja de entrada de su correo electrónico una carta de Jesús Terres (@nadaimporta) le haya "parecido providencial" y haya reafirmado esa primera convicción de que las casualidades no existen. La periodista no ha dudado en compartir con todos sus seguidores ese texto. "Que en Galicia tienen decenas de formas de nombrar a la lluvia, esto que cae del cielo tan solo es froallo. Según la Real Academia Galega es 'una lluvia muy pequeña'. Es que la lluvia también puede ser pequeña. Me ciño alto el cortavientos, es verdad lo que dicen, más vale mayo frío", compartía la periodista. 

Después continuaba la narración con una reflexión muy profunda sobre la vida y sus vicisitudes: "Subrayo en mi libreta un párrafo de Trías 'en esta vida hay que morir varias veces para después renacer. Y las crisis, aunque atemorizan, nos sirven para cancelar una época e inaugurar otra'". En la misma línea, el texto continuaba insistiendo en que "hablamos de la pérdida, de la fragua que es Madrid, de cómo narices se puede pelear (¿se puede?) contra la prisa del mundo".

Después seguía con un pensamiento sobre las vueltas que puede dar la vida: "Sé que cada historia (esa que vamos escribiendo a tientas a lo largo de nuestras vidas) es un bosque con cientos de sendas que se bifurcan, cerros altos, palabras por decir. Sé que todo esto será ceniza y que no siempre reinará la alegría. Eso es imposible". Cerraba esta parte más literaria diciendo que "un mismo anhelo sobrevuela la tarde —la búsqueda de la calma, mirar el mundo ya sin miedo, volver a ser. 'Morir varias veces para después renacer'. De dentro pa' fuera. Caer y levantarse. Andar pese a todo".

El siguiente párrafo parecía traer de vuelta a la periodista a su situación actual. "Ahora respiro el aire puro incomparable y los paisajes verdes de esta zona", dice y sigue contando cuál ha sido su ruta del día, "hemos pasado al lado de la isla de San Simón, que fue empleada como monasterio, lazareto, cárcel y hogar para niños huérfanos". Carbonero explica que se distrae escribiendo y, sin darse cuenta, "ya estamos en la ría de Pontevedra. Otra maravilla de la naturaleza", cuenta.

Con el último fragmento de esta reflexión, Sara parece querer enviar un mensaje de paz y calma a sus seguidores: "Respirar, coger aire, todo está bien y estará bien. Caer y levantarse, la alegría no estará siempre pero sí las ganas, andar pese a todo. La lluvia puede ser pequeña. Vamos. Actitud y mucho amor. Me acuerdo de Luz". Justo después, entre paréntesis, explica que el retrato que ha usado para ilustrar el texto lo tomo el verano pasado su hijo Martín, "titulado 'Mamá tiene los ojos tristes'". Su última frase es un canto a la fuerza y la esperanza: "Este verano será, de nuevo, invencible".

Sara Carbonero y su relación con Nacho Taboada

A pesar de querer dejar siempre fuera de los focos su vida privada, hace relativamente poco se daba a conocer la relación de Sara Carbonero con Nacho Taboada. Era el músico quien, en una entrevista en 'El Heraldo de Aragón', hablaba sin tapujos sobre el interés que genera su relación con la periodista. Era entonces cuando el artista dedicaba unas tiernas palabras a su pareja: "Lo vivo con naturalidad, sabiendo dónde estoy. La vida me ha llevado por este camino. He conocido a una persona muy especial y desde el primer momento sabía que esto iba a pasar". Justo después, explicaba cómo había decidido llevar este noviazgo, "con discreción, con mi forma de ser, siempre ajena a ese mundo". En este sentido, insistía en que "ambos tratamos de vivir con la mayor normalidad que podemos".

Además, para sorpresa de todos, Sara se ha animó a compartir una instantánea con su chico. Fue durante un plan con su amiga y socia Isabel Jiménez y su marido, Hugo Cruz. Los cuatro fueron a cenar a una trattoria italiana y, durante la sobremesa, Nacho sacó la guitarra y empezó a tocar. En la imagen que subió Sara se ve al músico de espaldas, en blanco y negro, y en otra aparecen todos en grupo. Acompañando las tiernas y divertidas imágenes, Sara escribía: "Pienso que un sueño parecido no volverá más". 

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