Ha sido un año muy complicado para María José Campanario por eso cuando ayer volvió a aparecer ante las cámaras, de la mano de su marido y habiendo recuperado su imagen habitual, fueron muchos los que respiraron aliviados.
No hace mucho que la mujer del diestro ha recibido el alta hospitalaria tras haber pasado cinco semanas ingresada en un centro psiquiátrico y tras su vuelta a casa María José intenta separarse de su familia lo menos posible. Es por esto por lo que, a pesar de saber que se exponía a las cámaras, la odontóloga no quiso dejar de acompañar a Jesulín en su primera tarde de toros de esta 'vuelta al cole'.
La pareja llegó a Peralta por separado y María José no acompañó a Jesús a la plaza. Campanario se quedó todo el día en la habitación del hotel, evitando incluso salir a desayunar con su marido. La única compañía que tuvo durante el rato que el torero estuvo en la plaza fue la de Matías, el chofer que acompaña a Jesús desde hace muchísimos años. Él mismo fue el encargado de contar que veía a la Campanario fenomenal, muy guapa y “casi como siempre” y que, aunque no había pasado la tarde con ella, sí se había acercado varias veces a la habitación a verla.
Aunque tenían el hotel reservado hasta hoy mismo a las 12 de medio día, los tres abandonaron el pueblo sobre las 20.30h de la tarde y pusieron rumbo a Cádiz donde habrían llegado bien entrada la madrugada.
Parece que tras una temporada con más altibajos de los previstos en los que han tenido incluso que retrasar una renovación de votos con los que querían celebrar su 15 aniversario de casados, la vida de los Janeiro Campanario vuelve poco a poco a la normalidad.