20 de marzo de 2016, 12:41
Mónaco celebra el Baile de la Rosa... sin Charlene
Alberto, perfectamente escoltado por su hermana Carolina y los hijos de esta
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El encargo de Carolina
El príncipe Alberto, junto a su hermana Carolina de Hannover, de Chanel, y el diseñador Karl Lagerfeld. Carolina encargó a Karl la ambientación de la fiesta cubana de este año.
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Alberto, con su hermana y sus sobrinas
Alberto II posó con su hermana Carolina, que ejerció de nuevo de primera dama, y con sus sobrinas Carlota y Alexandra, todas de Chanel. Carlota, reconciliada con Lamberto Sanfelice, no lo trajo a la fiesta, pues se trata aún de una relación incipiente.
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Los hijos de Carolina
Andrea Casiraghi y su mujer, Tatiana Santo Domingo, Carlota Casiraghi, Alexandra de Hannover y Pierre Casiraghi, con su esposa, Beatrice Borromeo.
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Pierre, con su esposa y sus hermanas
El hijo menor de Carolina, muy orgulloso junto a su esposa Beatrice Borromeo y sus dos hermanas, Carlota y Alexandra.
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Carolina y Karl
Son grandes amigos desde hace muchos años, de modo que no es extraño que Carolina y Lagerfeld se sienten juntos en la cena.
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El espectacular vestido de Beatrice
De rojo, con escote palabra de honor, el vestido firmado por Gianbattista Valli lucido por Beatrice Borromeo fue lo más espectacular del baile.
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Pierre, perdido en la falda
A la hora de bailar, Pierre Casiraghi tuvo que lidiar con la voluminosa falda del vestido de Beatrice.
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La pareja más romántica del baile
Pierre y Beatrice derrocharon glamour y romanticismo sobre la pista de baile del Sporting Club.
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Alexandra, la más 'salsera'
Y Alexandra, que debutaba en el Baile de la Rosa, se lo pasó en grande bailando salsa.
Las ausencias de Charlene de Mónaco son cada vez más comentadas. La última tuvo lugar ayer, cuando se celebraba una de la fiestas más sonadas del calendario monegasco: el Baile de la Rosa, cuyos beneficios van destinados a la Fundación Grace, madre del príncipe Alberto (¿se le habrá olvidado este detalle a Charlene?). Claro que el pequeño principado se basta y se sobra en lo que a glamour se refiere y la presencia o no de Charlene ni quita ni pone, la verdad.
Allí estuvieron arropando al príncipe Alberto II su hermana Carolina de Hannover y sus cuatro hijos: Andrea, con su esposa Tatiana Santo Domingo, Carlota -sin su amor, el cineasta Lamberto Sanfelice-, Pierre, acompañado de una espectacular Beatrice Borromeo, y la menor de los cuatro, la princesa Alexandra, que a sus 16 años ya no es tan pequeña y por primera vez asistía a este tradicional evento. Por supuesto, fue de las que más disfrutó del baile.
Y es que este año, el Baile de la Rosa hizo escala en Cuba, por lo que la salsa y los ritmos latinos, asi como la decoración de la Sala de las Estrellas del Sporting Club, inundaron por completo el ambiente. Color y sabor... y rosas. Pero ni rastro de Charlene.
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