Kiko Matamoros, antes que polemista, representante, colaborador, animal televisivo, etc, es padre. La unión que tiene con su hija es y será siempre a nivel celular, por muy mal que se pongan las cosas. Y, está claro, que el paso de Laura Matamoros por 'GH VIP' ya ha empezado a cambiar su relación, y que se deben una larga conversación para darse una oportunidad y arreglar las cosas. 

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Aunque su mujer Makoke haya expresado su deseo de ver perder a Laura, Kiko va con su hija. Y siempre ha sido así. Ha criticado muchas de las palabras salidas de la boca de la inquilina de 'GH VIP' y en ocasiones su actitud. Pero más por los años que lleva viciada su relación, no porque no la quiera o porque no esté en su equipo. Han sido muchos años hiriéndose y echándose cosas en cara, y eso no se arregla en tres meses. Pero Kiko y Laura siempre han formado parte del mismo equipo. 

El colaborador de 'Sálvame' no ha podido más y lo ha soltado: "tengo miedo a que me rechace mi hija Laura". Preguntado en si irá a recibirla a la gala final del reality el jueves 14 de abril, se ha derrumbado y ha confesado lo que le perturba imaginarse ese momento y de que no se cumplan sus expectativas. Pero el sentimiento no es solo con Laura, sino también con su hijo mayor Diego. 

La presión que también está sufriendo su hija, le ha acabado pasando factura también a él. "Tengo miedo al rechazo, porque es un tema complicado y por el uso que se puede hacer de todo esto". Tanta intimidad aireada, al final hace que se vengan abajo los muros y Kiko ha roto a llorar. Ver a su hija llorar de emoción anoche durante la llamada telefónica que recibió de su círculo más íntimo y saber que él no tiene derecho aún a pertenecer a él, duele. Y mucho más al escuchar a la segunda de sus hijas decir que prefiere arreglar las cosas con él y perder el concurso que tanto la está desgastando. Sin embargo, hay mucho rencor que curar, y Laura remataba que se sintió "dolida y utilizada" por su progenitor durante su visita al concurso. 

"No sé lo que he hecho en el concurso. De buena voluntad he podido meter la pata, pero no creo que nadie me pueda reprochar nada de eso". Dejando aflorar el dolor de la herida, el representante la desvinculaba del concurso y asumía su responsabilidad en el deterioro de la relación con Laura y Diego durante todos estos años: "De lo que me podría arrepentir es que he pisado espacios con ellos que no debería haber pisado".

Ningún padre quiere verse en una situación tan tirante y fría con su descendencia. Y Kiko Matamoros no es una excepción. El miedo a llegar a un punto de no retorno con ellos parece que le ha dado vértigo, y han hecho al colaborador de Telecinco con la lengua más afilada a este momento de sinceridad. "No soy una persona fácil, pero cuando me abro, soy la persona más sincera del mundo", decía conteniendo la emoción. El representante ha afirmado que en todo esta difícil relación que mantiene con ellos "subyace un rechazo hacia Makoke. Ella ha reconocido que se ha equivocado en algunas circunstancias, pero también ha hecho muchas cosas por ellos, y no se lo han valorado". Kiko ha acabado matizando que "si yo no me entrometo en sus vidas, no pueden pretender que mi vida se acomode a sus vidas y sus gustos". 

¿Creéis que es sincera la reacción de Kiko Matamoros? ¿Debería ir a recibir a su hija Laura a la final de 'GH VIP' que se producirá el jueves que viene, 14 de abril?