Isa Pantoja y Asraf Beno se han convertido en los primeros cocineros de la segunda temporada de 'La última cena' con Paz Padilla como anfitriona y no lo han tenido nada fácil. La hija de Isabel Pantoja ha acabado llorando después de que la presentadora le haya hecho preguntas muy personales sobre la mala relación que tiene ahora con su madre.

Artículo recomendado

Carlota Corredera contesta a quienes la critican por defender a Rocío Carrasco y a Fidel Albiac: "No me pagan"

Rocío Carrasco y Carlota Corredera

Todo ha empezado cuando Paz Padilla le ha preguntado si ha llamado a alguien de su familia para pedirle consejo. "No tengo a nadie a quien llamar", ha dicho Isa Pantoja viniéndose abajo. La presentadora ha metido el dedo en la llaga sacando el tema del problema que actualmente mantiene con su madre y la hermana de Kiko Rivera se ha roto por completo.

"Me he emocionado y ya está... Si estuviera la cosa bien le hubiera encantado hablar conmigo hoy. A ella le gusta la cocina, me habría dado algún consejo… Pero no me va a coger el teléfono, aunque esta vez no le he hecho nada. Está la cosa mal, no es algo mío, es de mi hermano", ha explicado Isa Pantoja, muy emocionada.

Isa Pantoja

Isa Pantoja se ha roto en 'La última cena' al hablar de su madre.

Telecinco

"Mi madre cuando se enfada se enfada con todos y también conmigo. Tengo la conciencia tranquila y por eso no me afecta en mi día a día, no es como otras veces que había cosas que sí. No quiero ponerme a llorar aquí", ha dicho la hija de Isabel Pantoja que ha recibido el consuelo de Paz Padilla.

Isa Pantoja ha acabado haciendo una confesión sobre el estado de su madre tras muchos meses de guerra abierta con su hermano Kiko Rivera. "No le puedo exigir nada porque ella no está bien... Pero esto no es que me afecte a mí, sino también a los nietos que nada tienen que ver", ha añadido.

Paz Padilla Isa Pantoja

Paz Padilla consuela a Isa Pantoja, hundida por su madre Isabel Pantoja.

Telecinco

Finalmente y para quitarle hierro al asunto, Isa Pantoja ha comentado que ella nunca ha cocinado en Cantora por el exceso de protección de su madre. "Mi madre me ve haciendo esto y me mata porque no me deja acercarme a los cuchillos... No quiere que esté ni al lado del aceite con ese te lo digo todo. Hasta que me he independizado no he hecho cosas", ha explicado ya más tranquila.