Sin poder cortar el cordón umbilical con su pasión por los ruedos, Fran Rivera ha encontrado en las artes marciales un nuevo aliciente. Quien le siga en las redes sociales, sabrá que el exdiestro es un entusiasta de esta práctica oriental, en concreto del aikido y el kendo, que lleva aprendiendo desde hace algún tiempo.
Cada vez que le toca entrenamiento, se deja el alma en el 'dojo', nombre con el que suele designarse el lugar donde se practican artes marciales y meditación. El alma y más de un rasguño. Y es que este tipo de disciplinas requieren del practicante una gran implicación.
Concentrado y con el pelo recogido en una especie de moño, le vemos como un auténtico guerrero japonés, vestido con el kimono y el faldón típico de aikido.
Ahora ha publicado orgulloso la portada de una revista especializada en artes marciales y en la que se le ve, literalmente, volando por los aires. El colaborador de 'Espejo público' estaba muy contento por haberse prestado a ser la 'víctima' de la llave de su maestro.
"Un honor ser tu 'uke', maestro", escribe junto a la portada de Cinturón Negro. En terminología propia de este tipo de disciplinas, Fran, que sujeta una pequeña arma denominada 'tanto', juega el rol de receptor de la técnica ejecutada por su profesor. La caída del exdiestro no ha quedado recogida por la cámara, pero si ha sido tan espectacular como la voltereta, esperamos que no se haya hecho mucho daño cuando sus huesos han acabado impactando contra el suelo...