EXCLUSIVA | El nuevo dardo de Nilson Domínguez a Rodolfo Sancho dos años después del crimen de Edwin Arrieta en Tailandia

"Es solo el principio", respondía Nilson Domínguez (34 años) a este medio de comunicación cuando le preguntábamos por su batalla legal con Rodolfo Sancho (50). Estaba claro que no se iba a quedar de brazos cruzados y una de las frases que más repite es que "está tranquilo".

Su querella contra el actor no ha sido aún admitida a trámite, mientras la que él le puso de vuelta sí ha dado lugar al inicio de un procedimiento judicial que ahora está parado. En junio, el venezolano no pudo declarar como investigado por un presunto delito de estafa continuada por problemas técnicos.

Los abogados del padre de Daniel Sancho demandaron también a algunos periodistas y programas al considerar que cruzaron ciertas líneas en la cobertura del caso durante el procedimiento judicial por el crimen de Edwin Arrieta en Tailandia. Ahora, casi dos años después, Nilson ha declarado como testigo en la causa abierta contra Esther Yáñez.

Desde Venezuela y en el municipio de Lagunillas, ha contestado a las preguntas del juez y esta vez sí pudo realizar la videollamada, mientras espera que se le vuelva a citar para intentar demostrar que no estafó a Rodolfo y su equipo legal. En la revista Lecturas hemos hablado con él en exclusiva.

Tranquilo y convencido

En la querella interpuesta por Rodolfo Sancho se incluyen múltiples conversaciones con el fin de demostrar que el testigo venezolano les solicitaba dinero para acceder a otra presunta denuncia de un menor de edad a Edwin Arrieta y para un viaje a Madrid y, posteriormente, a Tailandia, que finalmente no se realizó.

Con esto, consideran que queda demostrado que Nilson Domínguez no devolvió esas cantidades sin haberlas utilizado para el fin para el que fueron transferidas directamente a su cuenta en Venezuela. Él, sin embargo, insiste en que no tiene problema alguno en reembolsarlo, aunque todavía no ha tenido ese gesto.

"Estoy bien y tranquilo", nos decía solo unas horas antes de dar un nuevo golpe en la mesa, un dardo en defensa para comparecer como testigo en la causa abierta contra Esther Yáñez. La periodista viajó a Lagunillas en 2024 y fue la primera en entrevistar al venezolano, con el que habló y al que solicitó pruebas de lo que contaba sobre su participación en el juicio de Daniel Sancho.

Voluntad de hablar

Aunque en muchas ocasiones se ha señalado a Nilson Domínguez por el dinero que presuntamente habría solicitado a algunos medios de comunicación para romper su silencio o por los audios que supuestamente le envió Rodolfo Sancho, lo cierto es que, en nuestro caso, nunca nos ha solicitado ninguna cantidad y ha respondido a nuestras preguntas.

Es cierto que todavía no ha aportado una prueba que demuestre que tuvo una relación con Edwin Arrieta en el pasado. Siempre con el adjetivo "presunto" por delante, todavía hay muchas incógnitas por resolver.

Este martes, 8 de julio, el venezolano ha apoyado la defensa de Esther Yáñez y así nos lo corrobora: "Testifiqué la situación de los hechos de todo el porqué autoricé a Esther a sacar toda la información que le entregué". En el momento en el que la periodista se desplazó a Venezuela, él le concedió la primera entrevista tras la polémica intervención en el programa 'Y ahora Sonsoles'.

No quieren hablar

Desde la revista Lecturas nos hemos puesto en contacto también con el equipo legal de Rodolfo Sancho y nos aseguran que no quieren hablar sobre este asunto. Al menos por el momento, prefieren no entrar en valoraciones y mantienen que hablarán en sede judicial, donde esperan que se resuelvan todos los conflictos.

Solo faltan tres semanas para que se cumplan dos años desde que trascendiera que un español estaba implicado en el presunto asesinato premeditado y el descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta en Tailandia. Son fechas difíciles, sobre todo porque continúan luchando para demostrar la versión de Daniel Sancho.

El hijo del actor espera en la cárcel de Surat Thani a que se resuelva el recurso de apelación a la sentencia. Precisamente, el 29 de agosto también es día de aniversario, porque 365 días atrás se leyó el fallo con la demoledora condena en la Corte Provincial de Koh Samui.

A Daniel se le impuso una pena de cadena perpetua, que se conmutó directamente al considerar que había colaborado durante la investigación en las primeras horas junto a la policía tailandesa. Ahora, sus abogados tratan de encontrar la manera de que se repita el juicio, abierto a la prensa, con otras pruebas testificales y valorando algún aspecto que, consideran, no se puso sobre la mesa en la primera cita judicial.