Estamos más unidos cuando no nos sentimos bien tratados

La semana pasada no la terminé con buen pie. Horas antes de que comenzara la cuarta edición de la ‘Sálvame Fashion Week’ me di un golpe en el dedo gordo del pie derecho. A pesar de llevar bota y calcetín, el dolor que sentía era tan inmenso que no podía apoyar el pie en el suelo. El servicio médico de Telecinco vino enseguida a atenderme. Además, cuando hay un evento de esas características es obligatorio que contraten una ambulancia por lo que pueda pasar. Previamente, la enfermera me había entablillado el dedo gordo con el de al lado. Para calmar el dolor que tenía, me pincharon un analgésico en el culete. Si ya me dolía el dedo no os digo cómo me dolió luego el culo, también. Como os imagináis la noche fue redonda. Tengo que confesaros que eventos como el del pasado viernes no lo disfruto nada. Lo paso mal siendo observada y no me siento segura.

Es verdad, que este año la ‘Sálvame Fashion Week 2023’ era un evento especial, por lo que todos sabéis que conlleva. En cuatro semanas, dejaremos de estar en la parrilla de Telecinco. Esto hizo que me tomara este show televisivo de otra manera y tuviera ganas de hacerlo y de darlo todo. Por eso, con el contratiempo del golpe en el pie me vine un poco abajo. Necesitaba hacerlo, sobre todo, por todas las personas que están implicadas en un programa de televisión de estas dimensiones. Al menos, descubrí que con el dedo entablillado y al estar el pie sujeto con el zapato de tacón podía caminar. No sin dolor, pero lo podía hacer. Eso me animó para que pudiera hacer los siete desfiles y llegar hasta el final del programa. Lo importante es que el público lo disfrutara y así fue. Me consta por los mensajes que he recibido que la gente se lo pasó bien. La ganadora fue Cristina Porta, porque así lo decidió el público. También, Rosa López ganó ‘OT’ y al final quien triunfó fue David Bisbal. ¡Ahí lo dejo!

No tengo nada en contra de Cristina Porta, pero mi ganadora y me atrevería a decir que la de todos los compañeros fue Pilar Vidal. ¡Cómo disfrutó la Pilu! Verla así me daba fuerzas en cada desfile aunque me muriera de dolor cada vez que me tocaba salir a la pasarela. La Pilu, como la llamamos los que la queremos, es uno de los grandes descubrimientos de mi vida. Tiene una categoría profesional incuestionable. De hecho, de todos los compañeros de ‘Sálvame’ es la única que tiene hilo directo con Tamara Falcó. Tenerla como amiga es un tesoro.

Al final, fue una gala llena de emotividad, sobre todo, al principio. Esas palabras que llevábamos escritas en las camisetas nos hacía formar parte de un mensaje muy especial. Esa frase completa ya marcaba la emotividad de lo que estábamos viviendo esa noche. Estoy muy de acuerdo con las palabras del comienzo del programa de María Patiño. Jorge Javier estaba con nosotros en nuestro corazón, pero nos hizo mucha falta que estuviera físicamente. El pasado viernes no dejó de ser una fiesta que hicimos con ese sentido del humor y ese punto gamberro que nos caracteriza. Hubo sorpresas y lágrimas. Nada más empezar lloré de emoción al ver, por primera vez, la frase que habíamos construido con las palabras que llevábamos en nuestras camisetas. Horas después lloré sobre la pasarela porque no podía más físicamente. No fui la única que lloró. Lydia Lozano también lo hizo por llevar un vestido que no conseguía defender en uno de los desfiles.

Qué decir de esa Belén Esteban que lo dio todo. Hasta salió a desfilar con un bañador cuando no estaba previsto. ¿Por qué la gente quiere a Belén? Porque vive sin complejos y eso es admirable. No paró de darme ánimos durante toda la noche. Para mí fue un placer desfilar con un diseño de Eduardo Navarrete. Todo el mundo sabe mi relación con él y que le quiero con toda mi alma. Lucía, mi diseñadora novel, me hizo un traje que me encantó. Estaba como una loca con ese vestido tan atrevido. Lo que sí que hubo durante toda la noche fue compañerismo y buen rollo. Me sentí arropada por todos mis compañeros que sabían que lo estaba pasando mal. De alguna manera, y me emociono al escribir esto, hubo un silencio y unas miradas cómplices en las que unos a otros nos decíamos que estaremos juntos hasta el final, aunque hayan decidido que nos vayamos en pocos días.

La noche del pasado viernes nos acompañó todo: el frío, la lluvia, el viento y un equipo siempre entregado en ayudarnos en la medida de lo posible. Hablo del equipo de producción, de azafatas, de peluquería y maquillaje, capitaneado por Manuel Zamorano, que tienen que lidiar con todas nuestras manías, inseguridades y gustos. ¡Estuvieron más que a la altura! Cada uno tenemos una particularidad y eso ha hecho grande a ‘Sálvame’. Somos tan diferentes, que en ocasiones, nos hace estar muy unidos cuando nos sentimos no bien tratados. Digámoslo así. El lunes hemos vuelto a la normalidad. Nosotros somos así. Pasamos de 0 a 100 en pocos segundos, como los coches de alta gama. ¡El show continuará!