La Hacienda San José, la casa andaluza de Bertín Osborne en Sevilla: un cortijo de lujo rodeado de naturaleza, con varios edificios, capilla, piscina y gimnasio

En esta primera imagen de la fachada de la casa de campo de Bertín se ve muy bien cómo mantiene toda la esencia de la antigua almazara, a través de su estructura y de los elementos visibles típicos de las construcciones de aquella época, como los arcos de medio punto de ladrillo artesano, la forja, el barro cocido de los suelos, la madera, la teja árabe en las cubiertas y su característico color rojizo.

La casa andaluza de Bertín alberga varios salones, y este es uno de ellos. Es una estancia donde, como en el resto de la casa, predomina el estilo rústico y desprende mucha calidez y elegancia clásica. En este salón podemos ver tres sofás tapizados en blanco alrededor de una mesa de centro de madera robusta y rodeados, a su vez, de más muebles de madera, como la gran biblioteca de la pared del fondo. Las paredes son de ladrillo visto, hay una alfombra persa cubriendo el suelo de la zona de descanso y varias lámparas de sobremesa y fotografías familiares repartidas por el espacio. 

Bertín es amante del vino, así que no es de extrañar que en uno de sus comedores tenga una gigantesca colección de botellas de vino, listas para ser elegidas y abiertas para deleitar a los invitados del cantante. Las botellas están colocadas en estanterías altas,  enmarcadas en madera y con un tejadillo interior que recuerda a una antigua taberna castellana, cálida y con historia.

Enfrente de la gran estantería con botellas de vino, hay una mesa de madera maciza con sillas clásicas.

Esta cocina es la gran protagonista del cortijo de lujo de Bertín y por la que pasan todos los invitados a su programa “Mi casa es la tuya”. Es una cocina muy amplia con mucho mármol y tonalidades claras, como el blanco y el azul pastel. En su centro, tiene una gran isla con taburetes altos de madera preparada para comer, madera que también vemos en algunos muebles de almacenaje.

Este uno de los 10 dormitorios que tiene la casa del presentador que, como puedes ver, deslumbra una mezcla exquisita de rusticidad y elegancia. El protagonista indiscutible de la estancia es el imponente cabecero tapizado en cuero marrón, que enmarca dos camas individuales unidas. También está presente la pared de ladrillo visto que ya hemos visto en otras partes de la caleta y se ha utilizado una paleta de tonos tierra para crear una atmósfera serena y acogedora.

Los textiles con estampados étnicos en alfombras y cojines aportan un guiño cálido y personal, equilibrando lo robusto del mobiliario. Las lámparas de mesa con luz suave, la madera envejecida y los cuadros abstractos dan el toque final a un espacio que invita al descanso con estilo y personalidad. En el lateral, hay una puerta con un arco que da acceso a lo que parece ser desde aquí un cuarto de baño privado.

Este vestidor es amplio, funcional y lleno de carácter. Además, mantiene la misma estructura y construcción que venimos viendo hasta ahora en la casa, paredes de ladrillo visto, mobiliario de madera oscura y alfombras étnicas en los suelos. Nos ha llamado especialmente la atención que todo está perfectamente ordenado y accesible, con espacio para cada prenda, zapato y complemento.

Por la ventana con marco de madera entra mucha luz natural y en el arco del fondo se puede ver un dormitorio. En el centro del vestidor, Bertín tiene un puff de cuero grande que, además de servir para decorar, también es muy útil para calzarse y descalzarse.

La decoración y el estilo de este cuarto de baño nos parece única y muy original. Es un espacio muy colorido y con toques mediterráneos y exóticos gracias su combinación de azulejos amarillos y azules. Dentro de la ducha, hay un gran mural de inspiración egipcia y fuera hay una encimera de mármol amarillo con doble lavabo en azul oscuro. Un gran espejo recorre toda esta pared y el suelo, de madera oscura.

Aunque no lo parezca físicamente, Bertín Osborne tiene 70 años, de hecho, ya va camino de los 71, que los cumple en diciembre. Y si ha llegado a esta década tan bien es porque se cuida y hace mucho deporte, tanto, que tiene su propio gimnasio privado montado en una de sus habitaciones.

Si te volvemos a repetir que a la finca de Bertín no le falta de nada, es porque realmente no le falta de nada. Aquí una prueba: tiene hasta esta capilla, pequeña, bonita y muy bien cuidada. Sus paredes son en tono salmón y están combinadas con un zócalo de azulejos de diseño andaluz. En el techo, vigas azules.

Al fondo está el altar, centrado en un arco y decorado con imágenes religiosas y flores. Los bancos de madera, el suelo de tablones y la alfombra de fibras naturales refuerzan la sensación de calma e invitan al silencio y a la conexión espiritual.

Como era de esperar, los exteriores de la finca de Bertín son su mayor atractivo. Entre jardines y patios andaluces, también tiene montado un oasis de descanso con una gran piscina para refrescarse en verano. Esta parte de la casa también cuenta con una zona techada con pérgola de madera y techo de brezo y en ella parece que hay montado un comedor exterior.