En un mundo donde las tendencias van y vienen casi sin darnos cuenta, Carolina de Mónaco (68 años) nos recuerda que la elegancia atemporal no necesita esfuerzo,solo buen gusto. La princesa de Hannover ha reaparecido en la hípica con motivo de la celebración del Longines Global Champions League de Mónaco. Acompañada por su hermano Alberto, los hijos de Rainiero y Grace Kelly han hecho gala de su magnífica relación en la zona vip del icónico Port Hercule.
Con una elegancia innata que traspasa fronteras, Carolina volvió a demostrar por qué es un icono de estilo intergeneracional con un look que combina sofisticación y comodidad sin perder una pizca de ese glamour francés que tanto le caracteriza.
Cordon Press
La camisa blanca tipo Oxford, un básico que nunca falla
Nada de vestidos impresionantes ni brillos excesivos. ¿Su fórmula ganadora? Una camisa blanca estilo Oxford [clásico modelo que se caracteriza por el tejido y durabilidad y que se adapta a diferentes estilos], pantalones fluidos y mucha actitud. A Carolina de Mónaco solo le ha hecho falta una camisa blanca y un pantalón estampado para conseguir un look que grita elegancia sin esfuerzo. Una clase magistral de estilo relajado, sofisticación y buen gusto.
La camisa blanca —ese básico eterno— se convierte en el centro del outfit. Fluida, desabotonada en el punto justo y con las mangas remangadas como punto de naturalidad y sencillez, la cuñada de Charlene de Mónaco demuestra que una prenda simple puede tener muchísimo peso cuando sabes cómo combinarla.
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Aunque las opciones son infinitas ya que la camisa blanca tiene esa capacidad de adaptarse a cualquier estilo, Carolina acertaba de lleno al llevarla con unos preciosos pantalones con estampado zigzag y bajo desflecado en tonos morados, rosas, blancos y negros. Son cómodos, modernos y están llenos de personalidad. Perfectos para romper con la formalidad de la camisa aportando ese toque chic que enamora.
En lugar de recurrir a estructuras rígidas o siluetas ajustadas, Carolina ha querido dejar que la prenda fluya con naturalidad por encima del pantalón, demostrando que el estilo no está reñido con la comodidad.
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Este contraste entre la sencillez de la camisa blanca y la expresividad del pantalón refleja una estética muy actual que Carolina defiende a la perfección: la fusión perfecta de los básicos con piezas de carácter.
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Las sandalias de tacón sensato de Carolina de Mónaco
Fiel a su estilo sobrio pero cuidadosamente pensado, Carolina completaba el conjunto, que es ideal para la oficina o para un evento más especial, con unas sandalias negras con tacón sensato. Un diseño sencillo que destacaba por unos apliques dorados. Respecto a las joyas, la princesa de Hannover recurría a su colección personal con varias pulseras, unos enormes aros y su reloj de siempre.
A sus 68 años, Carolina de Mónaco apuesta por la autenticidad y la elegancia silenciosa, algo que aunque parezca sencillo es muy difícil de conseguir. Su último look es una lección de cómo llevar una prenda básica como la camisa blanca con personalidad y sin caer en lo predecible. Porque al final, el estilo no está en lo que se lleva, sino en cómo se lleva. Y en eso, Carolina es la gran maestra.