El 8 de julio de 2023, Tamara Falcó (43 años) e Íñigo Onieva (36 años) celebraron su boda. Un enlace que no estuvo exento de polémica porque llegó meses después de que la pareja rompiera y cancelara sus planes de contraer matrimonio. Cuando parecía que la reconciliación no llegaría, la Navidad previa al enlace la marquesa de Griñón decidió perdonar al empresario y retomar los planes con los que intentar afianzar su relación. La boda llegó, y hoy se cumplen dos años de ese sí quiero.
Un segundo aniversario que la pareja celebra en un momento marcado por su bajo perfil público. De un tiempo a esta parte, Tamara Falcó e Íñigo Onieva viven su relación de forma más discreta que antes. Puntualmente, sí que se dedican alguna publicación en redes sociales o se dejan ver juntos en algún evento. Pero nada que ver con el ritmo con el que hacían esto anteriormente.
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Sin embargo, esta estrategia no ha servido para paliar los rumores sobre su matrimonio. Continuamente, la hija de Isabel Preysler y su marido se enfrentan a esos comentarios que ponen en duda que estén juntos. Mientras, ellos están centrados en su trabajo. También en sus intentos por ser padres, aunque es algo que ahora han paralizado.
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En una reciente entrevista concedida por Tamara Falcó a la revista InStyle, la marquesa de Griñón revelaba que "tras probar diferentes métodos para quedarme embarazada, he decidido darme un descanso, porque me encuentro saturada. Me estaba afectando”. Ahora, lo que les toca es disfrutar de un verano en el que previsiblemente seguirán con esa desconexión.
El análisis de la psicóloga Lara Ferreiro sobre la pareja
En esta fecha tan señalada para Tamara Falcó e Íñigo Onieva y mientras ellos optan por no hacer ruido mediático, hemos hablado con la psicóloga Lara Ferreiro, autora del libro '¡Ni un capullo más!: El método definitivo para quererte y encontrar a tu pareja perfecta’, para que analice para la revista Lecturas cómo ve a la pareja cuando se cumplen dos años de su boda.
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Lara Ferreiro, sobre esos rumores de deslealtad que persiguen continuamente a Íñigo Onieva, ha comentado que “lo que hablan de él es que sigue de fiesta, que no se ha reconvertido, que sigue siendo el eterno fiestero y que no ha sentado la cabeza”. Según la experta, “creo que Tamara Falcó no puede más. Creo que hay mucha gente que piensa que Tamara es completamente ingenua, tontita y que no se entera de nada. Pero yo creo que ella pactó ser madre cuando Íñigo le puso los cuernos y dijo, esto es mejor que nada, por la presión del reloj biológico”.
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Sobre esto, Lara Ferreiro ha hecho hincapié en que “hablamos de Tamara y dos tipos de perfiles. O es completamente ingenua y cree en la reinserción del infiel, o bien es una tía súper racional y que dijo mira, pues es una decisión consciente. Hay esas dos opciones”. Dos teorías que no resultan descabelladas si se tiene en cuenta lo que ha apuntado la experta sobre que “la gente que conoce a Tamara, pues que sabe que en el fondo sabe lo que hay con él”.
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Entones, la psicóloga ha pasado a hacer el balance de cómo ha vivido Tamara Falcó estos dos años de casada junto a Íñigo Onieva. Por su experiencia y por cómo ve a la marquesa de Griñón, ha determinado que la hija de Isabel Preysler “yo creo que nunca se lo imaginó, yo creo que parece ser que es bastante infeliz en su matrimonio. Al menos en su comunicación no verbal, hay como una especie de tristeza, como esos sueños rotos que no ha podido cumplir”.
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Según Lara Ferreiro, una de las cuestiones que marcarían esa tristeza que llega a transmitir la hermana de Ana Boyer, vendría de que “creo que tiene ese guión ideal de lo que tendría que haber sido su matrimonio cristiano, tradicional y familiar. Y yo creo que Íñigo no era la persona para ella, sinceramente, creo que son tan distintos…”. Unas diferencias que ha desgranado al comentar que “él es fiestero sin reconvertir y ella es católica, tradicional, familiar, cristiana y que yo creo que ella necesita que la quieran”.
Además, la experta ha hecho alusión al deseo de Tamara Falcó de ser madre al explicar que la que fuera ganadora de ‘MasterChef Celebrity’ "tiene esa esperanza en que todavía a lo mejor puede ser madre, pero tiene muchísima, muchísima presión por quedarse embarazada. Tiene 42 años, entonces hay mucha presión del reloj biológico y de ahí esa ansiedad porque el sueño de Tamara siempre ha sido ser madre, formar una familia como lo hizo su madre, la reina de corazones”.
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Lara Ferreiro, tras sacar a relucir el nombre de Isabel Preysler en este análisis, no ha dejado pasar la ocasión de afirmar que “además dicen que Preysler no puede ni ver a Íñigo, presuntamente, porque ella de cuernos sabe un montón”. Decepciones amorosas vividas por ella y que ahora podrían influir en su hija Tamara Falcó. La psicóloga ha recordado cuando “Isabel estuvo casada con Julio Iglesias, entonces yo creo que Tamara lucha en este segundo aniversario entre la fe y la realidad… Esa fe de ojalá puedan tener hijos y se salve su matrimonio, y la realidad, pues es que no tiene nada que ver”.
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Por su experiencia trabajando la psicología con las parejas, Lara Ferreiro tiene la percepción de que “yo creo que Íñigo, enamorado de ella no lo ha estado, porque una persona enamorada no te pone los cuernos, tiene la vasopresina, la hormona de la fidelidad muy alta. Antes de su boda se fue a Burning Man y se lió con otra. Entonces, bueno, yo creo que Tamara tiene muchísimas dudas silenciosas, que no verbaliza, que se calla por no decepcionar a su entorno porque yo creo que en el fondo siente vergüenza de a lo mejor haber perdonado que no olvidado”.
Según la experta, Tamara Falcó, todavía hoy en día “podría estar comprometida con la pareja, pero con heridas no cerradas, porque al final tu cerebro no te deja descansar. Una persona te lo ha hecho, te lo va a hacer más veces, sumado al temor al fracaso de su matrimonio”.
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Lara Ferreiro ha recordado las experiencias de los padres de Tamara Falcó en el amor al asegurar que esto podría hacer que el miedo de la marquesa de Griñón a lo que ella considera fracasos amorosos aumente. “Creo que tiene mucho miedo a repetir patrones familiares de separación, como lo hicieron sus padres, el ya fallecido marqués de Griñón y su madre. Entonces ella como que tiene esa soledad emocional encubierta de ese presunto amor por Íñigo”, ha asegurado.
La psicóloga ha hablado también de una posible ruptura entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva. En el exhaustivo análisis que ha hecho para la revista Lecturas, Ferreiro ha dicho que “hay un 60 por ciento de probabilidades de que rompan por la diferencia de edad”. Sobre esto, ha profundizado al explicar que “es un criterio estadístico, también porque al final también tienen un diferente estilo de vida”.
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Un estilo de vida sobre el que Lara ha señalado que “aunque les encanta viajar, Íñigo es súper fiestero. Y esa diferencia de edad, de la sensación que él todavía no ha sentado mucho la cabeza…”. Diferencias que podrían conllevar a que “podrían estar atravesando la crisis postboda, que se llama, que si no se cumplen esos deseos de paternidad o maternidad, pues al final pues sale. Al final llevan cinco años juntos con intermitencia emocional. A lo mejor él busca libertad, ella busca estabilidad”.
Lara Ferreiro ha vuelto en este punto al tema de la maternidad. Sobre cómo afectaría esto a la pareja, ha revelado que “la maternidad era una meta para Tamara, Entonces, claro, Íñigo está entre el deber de que no salga nada publicado de él y que no dé más escándalos, pero luego tiene una vida más hedonista, vida libre, fiestas, disfrute… Entonces, claro, su compromiso con la paternidad, pues no sabemos hasta qué punto es cien por cien real”.
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La experta también ha hecho referencia a la edad de la marquesa de Griñón al hablar de su deseo de ser madre. “También solo hay un cinco por ciento de mujeres que tienen su primer hijo pasados los 40, y Tamara tiene 42”, ha recordado. En este sentido, ha sumado “la presión social y biológica, que todas sus hermanas son madres. Chabeli Iglesias y Ana Boyer, que encima Ana Boyer es más pequeña, pues ya tienen varios hijos”.
Entonces, Lara Ferreiro se ha preguntado, “¿qué pasa si no consiguen ser padres?”. Algo a lo que ha respondido contando que “el resentimiento se puede acumular muchísimo… Puede haber una desconexión afectiva, y luego además, Tamara podría vivir en un duelo prolongado. En esa fase de duelo reproductivo, que es similar a un luto, hay tristeza, culpa, pérdida de identidad… Entonces, ahí tienen un 60% de en los próximos cinco años romper”. Algo a lo que ha añadido que “si tuvieran hijos, tendrían menos probabilidades de romper”.
Después de todo esto, la experta ha compartido la conclusión de que, “este matrimonio, probablemente aunque ellos pongan en las redes sociales que están fenomenal, probablemente la procesión vaya por dentro y no es nada fácil lo que están atravesando a nivel psicológico”.