Por GLÒRIA FERNÁNDEZ REVILLA
Donde dije 'digo', digo 'Diego'. Los famosos son así de caprichosos y dicen y se desdicen con una facilidad pasmosa. El último caso ha sido el de la cantante americana Taylor Swift quien, hace unos meses revelaba en la publicación Lucky Magazine que no le gustaba su ombligo y que quería "mantenerlo como un misterio". "No me gusta que la gente sepa si tengo ombligo o no. Hasta donde tengo recuerdo, en mis apariciones públicas no se ha visto evidencia de que tenga uno".
De esta forma, algo absolutamente normal en la anatomía humana, tomaba una trascendencia sin igual, como ha revelado el revuelo que ha causado una de las fotos que la intérprete de 'Shake it off' ha compartido en su cuenta de Instagram. En ella, aparece con sus amigas y muestra una esbelta y cuidada figura, además del objeto de deseo de sus seguidores desde aquellas declaraciones. No en vano, desde el día de su publicación el pasado fin de semana, la foto lleva casi un millón y medio de "Likes".
La cantante ha estado disfrutando de unas vacaciones en Hawaii con sus amigas con quienes ha pasado unos días de actividades en la naturaleza. Y parece que se ha relajado tanto que se le ha olvidado el celo con el que mantenía oculto su ombligo.
Taylor está siendo noticia también, ya que unos hackers han tomado sus cuentas de Instagram y Twitter y han amenazado con publicar material sensible sobre ella. Haley Williams, cantante de grupo alternativo 'Paramore', fue la primera en darse cuenta de lo que estaba pasando y quien avisó a Swift. La estrella pop, tras solucionar el problema, se lo ha tomado con mucho humor y tuiteaba: "Los hackers dicen que tienen fotos mías en las que aparezco desnuda? ¡Ya les gustaría! Disfrutad con el photoshop, porque no tienen nada mío".