'El Hormiguero' empieza la semana recibiendo a la bailaora española más internacional, Sara Baras (51 años). Ese título se lo ha ganado a pulso. Solo hay que ver el éxito que tuvieron sus actuaciones flamencas en la Ópera de Sídney el pasado mes de enero. Pero la artista también es peregrina en su tierra. Volverá a actuar pero esta vez en Madrid, en el teatro EDP de Gran Vía, en el mes de mayo. La gaditana es conocida por su extensa trayectoria vinculada al flamenco sobre los escenarios. Una que empezó cuando apenas tenía 8 años.
El amor lo encontró entre tablas. "Mi marido y yo nos enamoramos bailando", confesó en una visita anterior a 'El Hormiguero'. Estuvo casada con el bailarín y coreógrafo José 'Pepín' Serrano durante casi dos décadas. Cuando se conocieron él interpretaba a Felipe el Hermoso. Ella, a Juana la Loca. Con el tiempo está dinámica continuó. "Ha sido Don Pedro cuando yo he sido Mariana Pineda. Ha sido el torero cuando yo he sido Carmen. Ha sido el presidente de las Cortes de Cádiz cuando interpretaba a La Pepa", relató. Compartieron casa, aspiraciones y escenarios. Pero esta relación acabó en 2019. Juntos cumplieron muchos sueños, entre ellos, el de ser padres. Sara y José tienen un hijo en común, que comparte nombre con su padre.
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GTRES
En estos más de 40 años, si hay algo que le ha costado afrontar ha sido separarse del pequeño. Por suerte, a su lado tiene a su hermana Triqui. Con ella comparte conversaciones entre bambalinas y confesiones en casa. Es un apoyo tanto en lo profesional como en lo personal. Junto a ella sueña cómo serán los próximos proyectos, unos que poco a poco se han ido haciendo realidad. Pero también es una de esas personas a las que recurrir cuando hay que cuidar del pequeño José. "Estoy muy unida y la que quiero mucho”, asegura en la citada revista.
Conocida en Estados Unidos y Japón
Su carrera es extensa. Le ha llevado a lugares tan lejanos como Japón o Estados Unidos. "Ellos (los japoneses) son unos enamorados del flamenco a niveles bestiales", confesaba hace años en el programa de Pablo Motos. En todo este tiempo ni ha protagonizado escándalos ni los ha buscado. "Nunca he tenido problemas, vivo de soñar y hacer soñar a los que me ven. Y la gente y la prensa respetan mi privacidad", aseguró a 'Diez Minutos'. Su nombre suene junto el de otros grandes del género, como Paco de Lucía, Enrique Morente o Antonio Gades. Para ellos solo tiene buenas palabras.
Sobrellevar la pérdida de Paco de Lucía fue uno de los momentos profesionales más complicados. Sin embargo, el tiempo le permitió ver el lado positivo de esa bonita y estrecha relación que había tenido con el que fue su maestro. "Parece que ellos nos arropan en el escenario. Que son ellos los que nos han enseñado a poder sentirlos sin sentir la pena de pensar que no están, a poder recordar momentos maravillosos que nos han regalado y poder hacerlo desde una parte positiva", expuso en 'El Hormiguero'.
Los primeros pasos de Sara Baras
Sara Baras comenzó recibiendo clases de baile en la academia de su madre en su pueblo natal. En San Fernando, Cádiz. Parece increíble, pero su trayectoria artística comenzó en ese instante. Rápidamente se subió a los escenarios y todavía no ha bajado de ellos. Ha bailado en las tablas de un sinfín locales, tablaos, teatros y anfiteatros. Su duende y su esfuerzo han sido reconocidos con numerosos premios como Premio Nacional de Danza en el año 2003 y en el 2020 obtuvo la 'Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes'.
Su pasión por el flamenco también le llevó a fundar su compañía y su propia academia. En 1997 siguió los pasos de su madre, Concha Baras. "Se lo digo siempre, con palabras, con gestos, con baile, con coreografías e incluso con espectáculos, y lo que me queda todavía por agradecerle… Mi madre no sólo me ha dado la vida, sino que nos ha inculcado el amor al arte, a la música, al flamenco", confesó Sara Baras.