Olvido Hormigos confiesa por primera vez en Lecturas cual ha sido el peor momento de su vida. Relata, ahora que todo ha pasado, el pánico que sintió cuando creyó que padecía cáncer de pecho. Todo empezó cuando le descubrieron un bulto en un control rutinario que ella debe hacerse con especial periodicidad dado que tiene antecedentes familiares con la enfermedad. Sus dos hermanos pasaron por ese trance. Hasta que recibió la llamada que le informaba de que el bulto no era maligno, a Olvido se le paró el mundo. Estar sana le reafirma en que sus hijos y su familia son lo más importante y asegura que no reconoce a la mujer que era, aquella que mantenía sexo loco con desconocidos. Ya se ha producido su temido encuentro con Alessandro Lequio. ¿Cómo habrá sido? Nos lo cuenta en exclusiva.

Estás muy guapa. Luces nuevo escote.
Sí, tengo un pecho nuevo. Este me lo han puesto detrás del músculo. Aún lo llevo muy mal porque tengo que dormir boca arriba y me cuesta mucho, me duele mucho la espalda. La primera vez que me lo operé fue hace unos diez años. Después de dar de mamar a mi segundo hijo, se me quedó un pezón invertido. Tenía mucho complejo, me metí en quirófano para sacarme el pezón y de paso me pusieron una prótesis chiquitita. Hace poco fui a ver a Ángel Martín, mi cirujano, y me dijo que una de las prótesis la tenía muy encapsulada y que me las tenía que cambiar. Yo notaba que tenía un pecho muy duro, que me lo tocaba y podía coger la prótesis con la mano como una bola dura, pero no era consciente de que tenía un problema. Tenía los pechos un poco separados, pero no me hubiera operado solo por eso, me ponía un sujetador y conseguía el canalillo que quería. Me extrañó muchísimo que me dijera que me pasaba eso en el pecho porque desde hace un tiempo cada seis meses he ido a la Seguridad Social a hacerme mamografías para controlar el bulto que me encontraron. Nunca me habían dicho nada.

¿Te descubrieron un bulto?
Sí, fue horrible. Fui a una revisión ginecológica hace año y medio y me descubrieron un bulto. Hasta que lo analizaron y me dijeron que no era maligno pasé unos días muy duros, creí que también tenía cáncer.

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