Suso Álvarez se quedaba acariciando el maletín de los 100.000 euros en la gran final de 'GH VIP 6'. Aunque ahora su mayor problema es prepararse para todas las críticas que ha generado su controvertido concurso y aclarar su relación con Aurah Ruiz, el concursante se ha tomado un breve respiro y se ha concentrado en todas las cosas buenas que le esperaban todavía al llegar a su casa en Barcelona. La única que no le ha juzgado, que le quiere como es y que estaba deseando verle entrar por la puerta. Quienes le siguen en redes sabrán que nos referimos a Luz, su preciosa chihuahua que le tiene el corazón robado.
Luz es su mejor amiga, o como él la describe, el auténtico "amor de mi vida". Antes de su encierro en la casa de Guadalix, han sido mucho los 'stories' y fotos en los que su mascota ha sido la 'actriz' principal. Y entendemos que a Suso se le deshaga el corazón, si es que tiene una mirada capaz de enternecer al ser humano más frío y duro.
Allí estaba, hecha un pequeño ovillo y sin poder creerse lo que veía: su 'humano' había llegado por fin a casa después de tantos meses de ausencia. Ambos han vivido un precioso reencuentro en el que Suso no ha ahorrado en besos y caricias, esos que le viene negando a Aurah desde que saliera de GH VIP.
Era la final de 'Supervivientes 2016' cuando Luz hacía su primera aparición televisiva. Suso era el primer finalista en quedar apeado y, en un reservado donde le esperaba su madre y su hermana, le sorprendían con la presencia de su mascota. El concursante se venía abajo, pues está muy unido a su chihuahua. La audiencia y el propio Jorge Javier Vázquez se quedaban de piedra ante las lágrimas de emoción de Suso al ver a su perrita, pero también porque nadie le imaginaba como propietario de un animal como Luz.
De nuevo, se ha vuelto a repetir la escena entre Suso y Luz, aunque en la intimidad. A pesar de los duros momentos que le esperan al exhabitante de 'GH VIP', sabe que para su chihuahua él también es el amor de su vida.