La noche del domingo no fue precisamente tranquila para Mónica Hoyos. La modelo, que desde el pasado jueves habita la casa de ‘GH VIP’, se encontró con una sorpresa que no le hizo ninguna gracia. Miriam Saavedra, ex de Carlos Lozano, llegaba al reality y no lo hacía de paso, sino para quedarse. “Este es mi concurso tanto como el tuyo”, fue una de las primeras cosas que le hizo saber la peruana a su compatriota. “No, querida, ahora vas a sufrir”, le respondió Mónica Hoyos desafiante.

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En ese encuentro de las dos exparejas de Carlos Lozano en la casa de Guadalix no hubo ni rastro de cordialidad. Mónica Hoyos trataba de guardar la calma ante una Miriam Saavedra que desplegó todo su histrionismo, sin embargo no podía evitar responderle y los encontronazos entre ambas se sucedían.

“No me toques, ten cuidado porque te expulsan”, decía Hoyos ante una Miriam que gesticulaba de forma exagerada. “Me estresas, me tensionas”, le respondía ella. “¿Esta es tu forma de empezar en televisión? No vas a llegar a nada. Haz castings”, le advertía Mónica. La exconcursante de ‘Supervivientes’ le respondía que no lo necesitaba. “No, chupándome la sangre ya estás”, le reprochaba Hoyos.

Miriam decía estar cansada de darle protagonismo a Mónica Hoyos, que al escuchar esa afirmación le decía: “¿Protagonismo? Si estás aquí por mí”. La nueva habitante de la casa de Guadalix no se callaba y le replicaba: “Mi relación te ha beneficiado porque eras un muerto televisivo”. Mónica Hoyos le decía que ella ni siquiera había llegado a trabajar en televisión.

La tensión, lejos de disminuir iba a más y llegaba a su punto más alto cuando Miriam mencionaba a la hija de Carlos Lozano y Mónica Hoyos. “¿Qué talento tienes? ¿Ser la madre de la hija de Carlos?” le decía. “Ten cuidado con lo de mi hija porque ahí te hundo en la miseria”, le respondía Mónica Hoyos muy molesta.

Los compañeros de la casa observaban la escena boquiabiertos desde un monitor. Después recibían a la nueva concursante y, mientras hablaban con ella, Mónica Hoyos no podía contener las lágrimas y acababa llorando de rabia e impotencia por tener a su gran enemiga televisiva dentro del reality.