La dura reflexión de Anita Matamoros después de conocer la enfermedad de su padre Kiko

La joven 'influencer', que acaba de cumplir 19 años, hace balance de un año durísimo marcado por el divorcio de sus padres y la enfermedad de su progenitor

29 de julio de 2019, 20:22

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Si hay una imagen que define a la perfección el primer año como mujer adulta de Anita Matamoros es de una montaña rusa de emociones. La hija de Kiko Matamoros y Makoke llegaba a la mayoría de edad poco antes de que sus padres decidieran separarse, noticia que ofreció en exclusiva Lecturas. Este año ha venido marcado por la guerra mediática que han protagonizado sus padres a lo largo de estos meses, así como su mudanza a Milán para empezar sus estudios de Diseño en Moda. Pero la vida volvía a sorprenderla con la peor de las noticias. Y es que la joven 'influencer' ha estrenado los 19 años conociendo la preocupante enfermedad a la que se enfrenta su progenitor.

Tal como contaba Kiko en exclusiva para Lecturas, le han diagnosticado varios tumores en la vejiga que deben ser operados con urgencia. Una noticia que caía como un jarro de agua fría sobre su círculo más cercano y que sumían especialmente a Anita en una enorme angustia y preocupación.

La batalla acaba de empezar, por eso el mensaje que ha decidido trasladar la familia Matamoros es el de celebración de la vida. Kiko ha disfrutado de un romántico viaje en Cartagena de Indias (Colombia) junto a su novia, la modelo Marta López Álamo. Por su parte, su hija pequeña ha sentido todo el cariño de los suyos en una fiesta de cumpleaños por todo lo alto.

Pasada la euforia de las celebraciones de este fin de semana, Anita ha sorprendido a todos sus seguidores con una dura reflexión cuyo contenido, sin duda, hace referencia a los duros momentos que ha tenido que superar en un año que ha venido cargado de toda clase de sinsabores, experiencias felices, pero también agridulces.

"A veces la vida decide darnos las lecciones más duras en los que se supone que deberían ser nuestros mejores momentos. Hace un año no me hubiese imaginado estar donde estoy, o mejor dicho, como estoy. Muchas cosas han cambiado en el último año, parecía que el tiempo se ralentizaba con las malas noticias, así como también se aceleraba en los buenos momentos, que han sido muchísimos", reflexionaba desde Instagram. Y continuaba: "Pero siendo realistas, este último año ha pasado volando, arrasando como un tornado lo que conocía como mi vida y dejando recuerdos nuevos, así como escombros que seguro seré capaz de reconstruir".

Si ha habido una frase especialmente emotiva, con la que ha demostrado el proceso de madurez que ha vivido, es la siguiente: "Lo voy a intentar, haremos lo que mejor sabemos hacer, ser fuertes, estar unidos y seguir caminando. No dejo de pensar que la vida quiere recordarme que es algo frágil y perecedero que debo disfrutar, y que de cada momento malo aprenderé una lección que quizá no quería aprender, al menos no de esa manera".

Finalmente, ha compartido una valiosa enseñanza, que seguro será muy útil para quienes la lean y hayan dejado que la conmovedora confesión de Anita les impacte: "Por eso os invito a no meteros nunca en la cama con la palabra en la boca ni con un pensamiento negativo sino siempre con la conciencia tranquila ya que es la única manera de alcanzar la felicidad y a vivir cada día como una nueva oportunidad, a querernos, cuidarnos y valorar más las cosas, personas y sobretodo los momentos.❤️"

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