El gesto de Francisco Rivera a su hermano Cayetano con el que podría romper para siempre su relación con él

Si estuvo, no se le vio. La ausencia de Francisco Rivera en el tendido de la Maestranza de Sevilla, cuando su hermano Cayetano Rivera firmaba su retirada del toreo, fue algo llamativo para toda la prensa que acudió a cubrir el gran día. 

La retirada de un torero no es cualquier cosa. Cayetano Rivera, hijo y nieto de diestros, se despedía de los ruedos y lo hacía en una de las plazas más importantes y, además, en una fecha enmarcada en una festividad clave, la Feria de Abril. Quizás a él le hubiera gustado hacer una última en Ronda, y participar en una Goyesca, que sus antepasados Ordoñez pusieron de moda, pero nada de eso ha sido posible. Y quizás, parte del malestar con su hermano mayor viene de ahí.

Mientras que a Francisco Rivera no se le vio, su hija Cayetana, que siempre se ha mostrado muy cercana a su tío, sí que fue una de las grandes protagonistas entre los asistentes. A su lado, su pareja, Manuel Vega, con quien lleva saliendo desde hace cuatro años, y, de su mano, Curro, su pequeño hermanito que parece haber heredado toda la tradición torera de su padre y Cayetano. 

Los asistentes a la despedida de Cayetano

La experta en marketing y en gestión de artistas eligió el tendido, mientras que su otro tío, Kiko Rivera, prefería contemplar los capotazos desde la barrera, en primera fila y muy cerca de su hermano mediano. El hijo de Isabel Pantoja, que hace un par de años tomó la decisión de mantener un perfil más bajo de cara a la prensa, no hizo ningú comentario y se limitó a apoyar a Rivera Ordoñez en este emotivo día.

Cayetano procuró mostrarse tranquilo, sereno y centrado en realizar la mejor faena. Dejar un buen recuerdo era esencial, puesto que el legado ya lo tenía garantizado. Han sido 20 años de carrera, de los que empezó como novillero, hasta acabar consagrado como una de las espadas más importantes del país. El hijo de Carmina Ordoñez fue criado en un ambiente de taurino, en el que se ensalzaban las figuras que habían sido su abuelo Antonio Ordoñez y su prade Francisco Rivera ‘Paquirri’. Como a su hermano mayor, le fue imposible escapar del embrujo y la fascinación que le habían inoculado desde que apenas eran bebés. 

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Todas esas semillas germinaron y terminaron por florecer. Para disgusto de su madre, no solo tenía un hijo torero, sino dos. La preocupación se multiplicaba. Aun así, Carmen siempre respetó las decisiones de sus vástagos y las apoyó con todas sus consecuencias. 

Los Rivera, dos hermanos toreros quienes, en los últimos años, han pasado por momentos de máxima tensión y cuya relación irregular parece encontrar el cénit de su crisis en la corrida Goyesca de hace un par de años, cuando Fran, encargado de la gestión de la plaza, parece que no tuvo en cuenta a su hermano a la hora de cerrar uno de los carteles. Esto disparó los rumores de mala relación entre los hijos de Carmina y la ausencia del mayor (o no presencia pública) los remata. 

La explicación que dio Cayetano

A pesar de que no hay fotos y nadie le vio, al finalizar la corrida, Cayetano rompía una lanza a favor de Fran, “os lo habéis perdido”, decía con cierta sonrisa irónica, quizás producto por el agridulce sabor de la despedida. “Estos días son felices y tristes a la vez”, decía al finalizar la faena.

Esta Feria de Abril quizás ha sido más atípica para Francisco Rivera, quien, tras ser padre de nuevo hace tan solo un mes, no se ha dejado ver por El Real, pero sí por la Maestranza -los fotógrafos captaron imágenes suyas el 8 de mayo en la plaza, acompañado por Lourdes Montes- lo que podría explicar esa presencia invisible del exmatador de toros en el día grande de su hermano. 

También hay que recordar que el marido de Lourdes también tiene una relación compleja con el menor de sus hermanos. Con Kiko pasó a��os sin dirigirse la palabra. Una vez estos fueron adultos y pudieron solucionar problemas que, en realidad, no les correspondían, vivieron un acercamiento. Cuando el DJ se alejó de su madre, Isabel Pantoja, los hermanos se unieron aún más. Pero duró poco. Los dos se han recriminado públicamente lo mal que lo han hecho; por lo que su relación parece rota e irrecuperable. Con quien Kiko no ha llegado a distanciarse ha sido con Cayetano, y muestra de ello, su presencia en el albero, como su fiel escudero.