La vuelta a la vida pública de Kate Middleton (43 años) es ya un hecho. Es cierto que cuida mucho sus apariciones pero desde que se confirmó la remisión completa de su cáncer su regreso está siendo de manera paulatina. El pasado fin de semana se dio un baño de masas en una de sus citas más especiales, la final del torneo de tenis de Wimbledon. Pero allí pudo vivir uno de esos momentos emotivos y conmovedores al poder charlar sobre su experiencia con un niño de 11 años enfermo de cáncer.
Todo Reino Unido desea con todas sus fuerzas que la mujer del príncipe Guillermo se reincorpore de manera plena a sus deberes institucionales. Sin embargo, la Princesa de Gales ya dejó claro que su prioridad era su recuperación, además de poder pasar tiempo con sus hijos. En cualquier caso, ahora llegan las vacaciones de verano donde el matrimonio podrá disfrutar de momentos de desconexión junto a sus tres hijos para poder olvidar el mal año que vivieron el año pasado.
La conmovedora conversación
Kate siempre tiene marcada una fecha en el calendario debido a su relación con el tenis. Nunca se pierde la final de Wimbledon y este año no iba a ser menos. De hecho, el año pasado tampoco dudó en aparecer en el palco oficial y hacer entrega del trofeo cuando se encontraba totalmente ausente de sus actos oficiales debido a la enfermedad. Pero este año la situación es muy diferente y ha vuelto a acudir a la pista de tenis.
Antes de todos los actos que estaban marcados en el calendario de la entrega de trofeos a los vencedores, Kate, Guillermo y su hija Charlotte quisieron desplazarse hasta la cancha oficial para conocer de primera mano todos los entresijos que se habían preparado. Por ello, no dudaron en hablar con la persona que había sido seleccionada para realizar el lanzamiento de moneda antes de disputarse la final de uno de los torneos más importantes del mundo.
Es allí donde Middleton no dudó en saludar a Ambrose Caldecott, gesto que con posterioridad repitieron tanto su marido como su hija. Tal y como recogen medio británicos como ‘The Sun’, el niño joven había sido diagnosticado de un cáncer de huesos el año pasado, sometiéndose al durísimo tratamiento que precisamente la Princesa de Gales conoce de primera mano tras haberlo sufrido en su propio cuerpo.
El niño no dudó en contarle su experiencia con la enfermedad tras el interés de la heredera a la Corona británica. “¡Qué valiente has sido! ¡Mucha suerte hoy! Te animaremos”, dijo Kate según recoge el medio inglés. “Hablamos de tenis, nuestros deportes favoritos, lo que viví el año pasado y cómo me afectó”, revelaba el joven niño tras haber podido mantener esta conversación con la heredera.
Por otro lado, la princesa conocía de primera mano todo este sufrimiento. “Dijo que lo sabía por su experiencia en mi situación”, explicaba el niño al medio británico. De esta manera, la prensa inglesa ha querido poner de manifiesto la implicación que tiene Kate en la lucha contra el cáncer, enfermedad que azotó fuertemente a la Casa Real británica el año pasado con los dos diagnósticos de cáncer del rey Carlos III y su nuera.
Conversaciones reales
Pero esta no fue la única conversación que mantuvieron los miembros de la realeza británica durante su visita a Wimbledon. También pudieron charlar con la pareja de tenistas que se alzaron con la victoria en la final de dobles que además eran británicos. “Fue un verdadero placer conocerlos hoy. Todos son aficionados al tenis, así que fue un placer conocerlos”, expresaba uno de los tenistas.
Por ello, no han dudado en revelar el interés de los miembros de la realeza. “Me preguntaron sobre la final de ayer, cómo se sintió ganar en casa y hacer historia. También me preguntaron sobre el calor y un poco sobre mis celebraciones”, explicaba al mencionado diario británico. “Esta mañana me dolía un poco la cabeza, pero fue un día fantástico. Me encantó tener a mi familia y amigos aquí. Jugamos muchas semanas fuera, así que tenerlos aquí, levantar ese trofeo con ellos, es realmente especial”, añadía sobre sus celebraciones.
El medio británico también ha hablado con algunos de los recogepelotas del torneo. “Nos preguntaron principalmente sobre el entrenamiento, cuánto dura, qué tan duro es, y nos recomendaron mantenernos hidratados”, decía uno de ellos. En cualquier caso, lo que queda patente es que la Casa Real británica continúa por esa línea de acercamiento y de mostrarse más naturales con respecto a épocas pasadas.
