La agenda del rey Felipe VI y la reina Letizia está de lo más apretada. Tras su estancia en Roma debido a la misa del nuevo papa León XIV del pasado domingo, los monarcas han retomado sus actos oficiales este lunes. Sin embargo, el próximo miércoles se iba a producir un encuentro con la visita del sultán de Omán. No obstante, la Casa Real de dicho país ha aplazado esta visita, ya que ha fallecido la suegra del sultán. De esta manera, obliga a los padres de la princesa Leonor a modificar su agenda in extremis.
No es la primera vez que los Reyes de nuestro país tienen que modificar su agenda por situaciones totalmente inesperadas. En las últimas semanas ha ocurrido de hecho en varias ocasiones. Primero fue con el funeral del papa Francisco y luego llegó la misa de entronización del nuevo Pontífice. Los padres de la infanta Sofía no dudaron en desplazarse este fin de semana hasta la plaza de San Pedro en El Vaticano para poder estar presentes en esta misa inaugural. Ahora vuelven a verse obligados a un cambio de planes por un acontecimiento inesperado.
La muerte de la suegra del sultán de Omán
Los monarcas esperaban esta visita para el próximo miércoles. Haitham bin Tarik iba a realizar un viaje de Estado en nuestro país, para lo cual había organizada incluso una cena en su honor en el Palacio de El Pardo. Además, también se reuniría con el presidente del gobierno, una cita que estaba fijada para el próximo jueves en el Palacio de la Moncloa. Sin embargo, desde los medios oficiales del país árabe han comunicado la cancelación de este viaje.
“Ha fallecido la madre de Lady Al-Jalila. Pedimos a Dios que la agrande con su misericordia y la habite en sus vastos jardines”, decía el comunicado. De esta manera, no han ofrecido muchos más detalles de lo ocurrido. “A raíz de la declaración emitida por el Diwan de la Corte Real sobre la visita de Su Majestad el Sultán Haitham bin Tariq al Reino de España el martes, el Diwan de la Corte Real desea informar que la visita ha sido aplazada hasta nuevo aviso”, añadían.
Así se confirmaba la cancelación de esta visita prevista, tan solo 48 horas antes de la llegada del sultán a nuestro país. De hecho, este encuentro ya no figura en la agenda oficial de la Casa Real española, por lo que habrá que esperar a conocer la nueva fecha en que deciden realizar este viaje, ya que como ellos mismos confirman ha sido aplazada. En cualquier caso, se trata de una modificación in extremis de la agenda de los Reyes de nuestro país.
La visita a Roma de los reyes
La Casa Real española confirmaba que los monarcas iban a estar presentes en esta misa que tuvo lugar el pasado domingo. Además, se trataba de un momento muy especial, puesto que la reina Letizia iba a poder hacer uso del famoso privilegio de blanco que solo poseen seis mujeres en todo el mundo. De hecho, así fue. Letizia lució espectacular en su visita a Roma con su mantilla en su encuentro con el Pontífice.
No obstante, los monarcas no dudaron en desplazarse un día antes de dicha misa. El mismo sábado Felipe y Letizia se dejaron ver por la Embajada española en la capital italiana, evitando así cualquier contratiempo que pudiera surgir y que les impidiera estar presentes en un acontecimiento tan destacado en el que se iban a reunir multitud de miembros de las realezas europeas y otras personalidades internacionales al día siguiente.
La coincidencia hizo también que dicho fin de semana se celebrase en Roma el Jubileo de las Cofradías, un acto religioso que provocó que gran cantidad de españoles acudieran a dicho lugar. De hecho, la propia Ana Rosa Quintana ha confesado este mismo lunes que pudo ver a los monarcas, aunque de lejos, puesto que ella viajó por este motivo y ya aprovechó su estancia para poder disfrutar de la primera misa del papa León XIV.
Por ello, los padres de la Princesa de Asturias se daban un baño de masas en su llegada a la capital italiana, donde hablaban con algunos españoles que estaban vitoreando sus nombres. De hecho, la reina Letizia se adelantaba en un momento dado a su marido mientras él le preguntaba a algunos españoles cómo se encontraban. De esta manera, volvían a poner de manifiesto su cercanía y naturalidad a la hora de pararse a conversar con algunas personas durante su estancia en Roma, como ya han hecho en multitud de actos oficiales para interesarse por la gente.
