A principios del mes de diciembre, Edmundo cortaba su relación con María Teresa Campos con un whatsapp. Ponía así fin a una relación de casi seis años, lo que supuso un duro golpe para Teresa. Al humorista siempre le gustó presumir de ser un espíritu libre, algo que Teresa conocía muy bien cuando vivían juntos. Bigote tenía inundado el porche de la mansión con las camisetas que él pintaba y dejaba secar allí. Además, esa manera de ser de Bigote se dejaba notar en el peculiar desorden que reinaba en el cuarto que durante años él ocupó en la casa, y que todavía no ha vaciado.