Belén Esteban, que hizo la segunda mayor puja por el chalet de Toño Sanchís, ha pasado a ser la máxima postora después de que quien la ganase en primer lugar haya renunciado a su derecho a adquirir la casa. Esta persona habría alegado que desconocía que además tendría que hacer frente al pago de la hipoteca, que asciende a 260.000€, y de esta manera la casa ha pasado a manos de Belén. La colaboradora, que planea venderla, podrá recuperar todo lo que le debía Toño.

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