Anabel Pantoja avanza cómo será su boda y lanza un dardo contra Kiko Rivera: "Las cosas han cambiado..."

Con esta nueva máxima, Anabel Pantoja ya se ha puesto manos a la obra para organizarla. “De momento, la boda es íntima”, ha avanzado en ‘Conexión Honduras’, “invitaré a los míos y a la familia de Omar. Quien no quiera, ni le apetezca, no le puedo obligar”, ha lanzado, en clarísima referencia a su primo Kiko Rivera, con quien atraviesa una época complicada.

El DJ le echa en cara que no se moje en su guerra con su madre y la influencer desearía no tener que pronunciarse ni por uno ni por otro y permanecer al margen de toda esta historia. “Me encantaría que vinieran todos pero es imposible”.

¿Y os acordáis cuando Anabel Pantoja y su Negro se prometieron? Nosotros sí. También recordamos a la perfección que la colaboradora dijo que deseaba que su primo la llevara al altar, ejerciendo de padrino; pero su último distanciamiento lo complica todo. 

“Cuando decidí casarme, dije que fuera él pero las cosas han cambiado… Me encantaría que él estuviera pero si él decide que no pues nada. Yo me caso con Omar, no con nadie”, ha resuelto tajante.

Respecto a la localización del ‘si, quiero’, Anabel Pantoja también lo tiene claro: “La boda será en Gran Canaria, no en Sevilla”, como en un primer momento deseó, “ha cambiado la gente, la forma y todo”. Y es que, como decimos, la treintañera ha pasado de desear un bodorrio sevillano por todo lo alto a querer una celebración mucho más pequeña y solo con los imprescindibles. “Voy a pensar en mí y en él, no en los invitados”, ha convenido.

Desde Honduras, Omar le contaba estos mismos planes a Lara Sajen. “La boda se va a hacer y es entre ella y yo”. “Nos casamos en septiembre para este año. Espero que vaya su tía también. No me ha contado nada, ni sé cómo están las cosas fuera. Su padrino es Kiko, ella quiere que le lleva al altar. Siendo en Gran Canaria y demás, yo espero que vaya toda su familia. Si al final se ha reconciliado su tía con su primo o no, no lo sé… ella es una persona muy familiar. Que no viene ninguno, me da igual, la boda se hace”. Pues ya es oficial, en septiembre, iremos de boda.