Quedan ya pocas horas para que Elena Tablada y Javier Ungría se den el 'sí, quiero' en Cuba, la tierra que vio nacer a la familia de la diseñadora y a cuya abuela ha querido rendir un emotivo homenaje casándose en el mismo lugar que lo hizo ella con su abuelo, la iglesia de San Juan de Letrán, en El Vedado.

Este sábado, Elena y Javier serán marido y mujer ya con todas las de la ley, aunque, a decir verdad, ya celebraron su boda civil este pasado mes de agosto en Miami, por lo que oficialmente ya están casados. Pero Elena quería esta boda cubana y Javier Ungría no ha podido negárselo.

Artículo recomendado

David Bisbal da luz verde para que su hija vaya a la boda de Elena Tablada

David Bisbal Elena Tablada

¿Pero quién es este hombre que le ha robado el corazón a Elena Tablada hasta hacerle olvidar al padre de su hija? Javier Ungría tiene 37 años, la misma edad que Elena y es, ante todo, un hombre discreto, que no busca la fama y deja que sea su pareja la que conceda entrevistas, asista a los photocalls y sera 'la famosa' de la casa. Él prefiere permanecer en un segundo plano, aunque en sus redes sociales no duda en apoyar totalmente a su futura esposa, como cuando esta intervino en 'Viva la vida' y dijo la frase que abrió la caja de los truenos: "Ahora mismo mi relación con David Bisbal es insostenible".

Javier es sobrino de Miriam Ungría, princesa de Tirnovo y viuda de Kardam de Bulgaria, primogénito del rey Simeón de Bulgaria y fallecido en 2015 a causa de las gravísimas heridas sufridas en un aparatoso accidente de tráfico que había sufrido unos años antes. La familia de Javier Ungría controla el 10 por ciento de Banco Gallego y el 13 por ciento de la Inmobiliaria Valdebebas. Su abuelo, Bernardo Ungría, es heredero de Patentes y Marcas, dedicada a la defensa de la propiedad industrial desde 1891, que ahora dirige su hijo Javier, futuro suegro de Elena Tablada. Los hijos de Bernardo formaron parte de la llamada generación de cachorros de la 'jet' y se codeaban con los Martínez-Bordiú o los Gómez-Acebo.

Javier estudió Derecho y Administración de Empresas –su padre, Javier Ungría López, es abogado–, pero siendo como es un gran aficionado a la gastronomía su sueño era tener un restaurante propio. Junto a su amigo y socio Marcos Diéguez montó el restaurante Haches, en pleno barrio de Salamanca, muy concurrido por la 'jet set' madrileña. El establecimiento está especializado en pescado y marisco. A Javier le encanta la buena comida, tanto la sofisticada como los tradicionales platos de cuchara. Además, es un cocinillas y su especialidad son los arroces. Todos los jueves reúne a su grupo de incondionales y cocina para ellos un buen arroz. Es un hombre inquieto, activo, pero que también ama la tranquilidad y una buena partida de mus con los amigos.